Una fuente de la administración del presidente turco Recep Tayyip Erdogan confirmó el miércoles que la situación en Turquía está bajo control y que “las autoridades y los sistemas legales están actuando con extrema paciencia” con los manifestantes.
En declaraciones a la agencia de noticias rusa RIA Novosti, la fuente declaró: “Los objetivos de estas provocaciones son claros: desestabilizar la situación en Turquía y asestar un golpe a la economía”, y añadió que “todos estos intentos están condenados al fracaso.”
“Los enemigos del país que intentaron explotar la situación para lograr sus objetivos han sido eliminados. Turquía y el pueblo turco son capaces de mantenerse firmes y responder a cualquier provocación”, afirmó.
En el mismo contexto, la fuente confirmó que no existen problemas relacionados con la seguridad turística en Turquía, señalando que “las autoridades oficiales competentes del país consultan regularmente a las empresas turísticas sobre cualquier incidente que pueda perturbar a los turistas durante sus vacaciones, y hasta la fecha no han recibido ninguna queja”.
Este martes, las protestas se intensificaron en Turquía tras el encarcelamiento del alcalde opositor de Estambul, Ekrem Imamoglu, y la oposición organizó nuevas manifestaciones en medio de un creciente movimiento estudiantil.
Las protestas, que han tenido lugar en al menos 55 de las 81 provincias de Turquía, han provocado enfrentamientos con la policía, con más de 1.400 personas detenidas en los últimos seis días. Las autoridades turcas han prohibido las manifestaciones en Estambul, Ankara y Esmirna.
Source: Al Mayadeen
