El mandatario Bashar Al-Assad destacó este sábado el respaldo que ofreció China a Siria durante los años de la guerra y abogó por mayor cooperación económica con el gigante asiático.
Pekín apoyó políticamente a Damasco en el Consejo de Seguridad y en varios foros internacionales, y las posturas chinas son claras, honestas y basadas en principios invariables, destacó Al-Assad en una entrevista con la Televisión Central de China (CCTV) publicada hoy por los medios aquí.
Denunció que su país sufre un asedio económico cruel y peligroso impuesto por Occidente con el objetivo de matar de hambre al pueblo sirio, lo cual da importancia a la priorización de la colaboración con China en el campo económico.
“La nación asiática nos proporciona ayuda humanitaria y desempeña un papel importante en aliviar el sufrimiento de los sirios. Sin embargo, haremos esfuerzos para desarrollar mecanismos que transformen los deseos en proyectos conjuntos de naturaleza económica e industrial”, precisó el jefe de Estado.
Según Al-Assad, China es una superpotencia que desempeña un papel muy importante en el mundo y hace asociaciones lejos de la hegemonía.
Alabó las iniciativas propuestas por el presidente chino Xi Jinping basadas en el desarrollo y la seguridad a nivel global, y consideró que no puede haber fomento sin estabilidad en el mundo.
El mandatario reconoció que la guerra en Siria no ha terminado, y denunció el saqueo de las riquezas del país por parte de Washington y los grupos terroristas.
“Detener la contienda y comenzar la reconstrucción hará que Siria sea mucho mejor de lo que era antes de la agresión”, concluyó el mandatario.
Source: Prensa Latina