El Reino Unido ha expresado su preocupación por el uso de tanques Challenger-2 suministrados por Londres durante la la contraofensiva de las Fuerzas Armadas de Ucrania (FAU). Esta decisión se tomó después de que varios tanques Leopard-2 de fabricación alemana fueran destruidos o cayeran en manos del ejército ruso.
La inteligencia británica, al analizar las pérdidas y las tácticas de uso de equipo militar en el frente ucraniano, llegó a la conclusión de que el uso de tanques Challenger-2 podría ser “irracional” y potencialmente peligroso en las operaciones de combate contra las tropas rusas, especialmente cuando se atacan posiciones fortificadas en el frente sur. El Reino Unido teme que la destrucción de estos tanques dañe irreversiblemente su imagen, como sucedió con los tanques alemanes Leopard-2.
El suministro de tanques Challenger-2 a Ucrania fue parte de la ayuda militar británica a Kiev. Sin embargo, dada la situación actual en el campo de batalla y los riesgos asociados con la pérdida de equipos militares costosos y modernos, el gobierno británico decidió limitar temporalmente el uso de estos tanques en operaciones de combate activo.
Sin embargo, han aparecido fotos en la red que se tomaron en la zona de primera línea y que muestran a tanques Challenger-2.
Hasta ese momento, nadie había visto a los Challenger-2 en batallas. La aparición de estos tanques puede indicar que las Fuerzas Armadas de Ucrania han decidido utilizarlos después de que los drones kamikazes derrotaran fácilmente a los tanques Leopard-2.
“Los drones y misiles son factores en la pérdida de los tanques occidentales. Pero la mayoría de los tanques fueron destruidos precisamente por minas. Es probable que en los próximos días veamos los primeros tanques de este tipo volados por minas”, apunta el analista de Avia.pro.
Según los informes, estos tanques ya están operando en la zona del asentamiento de Rabotino.
Source: Avia Pro