Irán ha roto el monopolio de la producción de turboexpansores que antes tenían 3 países occidentales.
Expertos iraníes en la planta petroquímica de Shazand, en la provincia iraní de Markazi, diseñaron y fabricaron un turboexpansor en el país, rompiendo el monopolio de Occidente sobre la producción de estos equipos.
Según una publicación de la Agencia de Noticias Shana del Ministerio del Petróleo de Irán, los especialistas lograron la hazaña en colaboración con una empresa iraní basada en el conocimiento. El turboexpansor es fabricado por solo tres países occidentales.
El turboexpansor local ahorraría millones de dólares a las principales empresas petroquímicas iraníes, ya que ahora pueden comprar esta turbina, que se usa comúnmente en procesos de baja temperatura, a un precio mucho más bajo que sus versiones fabricadas en el extranjero.
El turboexpansor autóctono está operando actualmente en la ARPC (Compañía Petroquímica de Shazand), intercambiando calor y suministrando combustible a los hornos de su planta de olefinas.
La planta de Shazand se ha declarado totalmente preparada para abastecer a otros complejos petroquímicos iraníes con su turboexpansor de fabricación local.
Los turboexpansores se utilizan ampliamente como fuentes de refrigeración en procesos industriales como la extracción de etano y líquidos de gas natural (LGN), la licuefacción de gases (como oxígeno, nitrógeno, helio, argón y criptón) y otros procesos de temperatura.
Los turboexpansores actualmente en funcionamiento varían en tamaño desde alrededor de 750 W hasta alrededor de 7,5 MW.
Source: Medios iraníes