Con el Estado libanés en estado de bancarrota, y el dólar que sigue disparado, Hezbolá ha donado combustible diésel a algunas escuelas públicas de la Bekaa, donde los inviernos son particularmente duros y las temperaturas descienden la mayor parte del tiempo bajo cero.
Fue “Movilización Estudiantil”, la rama de Hezbolá que se ocupa de los temas relacionados con las escuelas, los profesores y los estudiantes, la responsable de esta distribución.
El miércoles 21 de diciembre se distribuyeron unos 8.000 litros de combustible a 7 escuelas públicas.
Este combustible se utilizará para compensar los cortes de energía que afectan a todas las regiones libanesas sin excepción. Debe utilizarse principalmente para calentar las habitaciones de los estudiantes.
El director de la Escuela Secundaria Pública Chmestar explicó las razones de la escasez en estas escuelas. “Extiendo mi agradecimiento a “Movilización Estudiantil” por proporcionarnos combustible para calefacción para nuestra escuela secundaria después de que no pudimos proporcionarlo a través de las arcas escolares porque los fondos, si se proporcionan, son confiscados por los bancos y no podemos retirarlos. Nuestra escuela secundaria necesita de 12.000 a 13.000 litros de fuel oil cada año, lo que cuesta 600 millones de libras libanesas. Esta cantidad no está asegurada. Y parte se confisca de los bancos”, explicó Akram Alhaj Hassan.
El precio de 20 litros de diésel que costaba 20.000 libras antes de la crisis económica que asoló Líbano a partir de 2019 ha subido a 809.000. Multiplicado por más de 40 veces. Esta crisis económica, atribuida entre otras cosas a las políticas monetarias de Riad Salamé, presidente del Banco del Líbano desde el final de la guerra civil, está marcada por una devaluación sin precedentes de la libra libanesa y una inflación vertiginosa.
Source: Al Manar