Rusia ha mostrado inequívocamente su apoyo al tratado de libre comercio de Eurasia con Irán. Con una reducción del 10% de los aranceles a los productos iraníes respecto a los productos turcos y chinos, Rusia prácticamente ha allanado el camino para que, a corto plazo, se pueda llegar a un nivel de exportaciones iraníes de 10.000 millones de dólares al país. Esto servira también para promover, tras la salida de las empresas occidentales, los intercambios de Rusia con países amigos y aliados.
El presidente ruso anunció en una reunión del Consejo Económico Supremo de Eurasia que apoya la extensión del acuerdo temporal de libre comercio de la Unión Económica Euroasiática con Irán, y que están en marcha negociaciones para concluir un acuerdo de libre comercio “en toda regla”. La implementación del tratado de libre comercio tendrá un impacto significativo en el comercio entre Irán y Eurasia, y para fines de este año, el comercio bilateral aumentará en un 73,5% para alcanzar los 5.000 millones de dólares.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia dijo recientemente en un comunicado que, a pesar de las sanciones occidentales contra Rusia e Irán, Moscú y Teherán fortalecerán la cooperación bilateral en todas las áreas. A pesar de las medidas restrictivas ilegales tomadas contra Rusia e Irán por varios países hostiles en el texto se enfatizó la intención mutua de fortalecer la cooperación integral.
Rusia e Irán han comenzado a trabajar juntos para conectar sus sistemas interbancarios y eludir la red de transacciones financieras del Swift, un camino que también están siguiendo otros países como China. Rusia e Irán enfrentan severas sanciones occidentales, lo que hace que sea difícil, si no imposible, liquidar sus cuentas comerciales a través del Swift. Recientemente, a siete bancos rusos se les prohibió usar el Swift y su acceso a los mercados internacionales por medio de ese sistema se está volviendo virtualmente imposible.
Rusia tiene su propio mecanismo de pago llamado “Sistema de Transferencia de Mensajes Financieros” o SPFS, que tiene una función similar al Swift. Esta red de transacciones financieras lanzada por el Banco Central Ruso ha estado en desarrollo desde 2014 después de que EEUU amenazara con desconectar a Rusia del sistema Swift. Alrededor de 40 a 50 países trabajan con Moscú y son miembros del sistema ruso. Por supuesto, Rusia sigue dependiendo todavía en buena medida del Swift, pero sus autoridades ya tenían planes para salir de él. Entonces, ¿qué harán las sanciones estadounidenses? Impulsar este mecanismo ya irreversible y avanzar en la creación de un orden económico y un sistema financiero sin el dólar.
Source: Press TV