El golpe que Israel creía que iba a ser fatal se ha revelado como un gran fiasco: el bombardeo del supuesto nuclear de Al Kibar, en Deir Ezzor hace 11 años no ha dado miedo a nadie. El mundo entero se ha burlado de los intentos de Israel de jactarse de operaciones pasadas, lo cual constituye una señal de que en la actualidad la entidad sionista no tiene nada de lo que vanagloriarse.
Según el periódico Rai al Youm, la revelación hecha por los medios israelíes forma parte de una “campaña de intimidación anti-iraní” que Netanyahu dijo durante su última visita a Washington que iniciaría en previsión de una posible retirada de EEUU del acuerdo nuclear en mayo, lo que podría dar lugar, a su vez, a una retirada de Irán. El. objetivo de la campaña es “dar miedo” a Teherán con respecto a un posible ataque aéreo israelí contra sus instalaciones nucleares con el fin de que no abandone el acuerdo y termine por someterse a las presiones occidentales para recortar su programa de misiles.
Rai al Youm ve otro motivo más en esta revelación: “Desde el derribo de un F-16 por la defensa antiaérea siria el 10 de febrero, Israel ha comprendido que ni Rusia ni Damasco bromean y que todo nuevo ataque israelí será respondido por la cada vez más sofisticada defensa antiaérea siria -y en su caso la rusa-.
Las victorias del Ejército sirio en la Guta Oriental no resultan tampoco extrañas a este golpe mediático de Tel Aviv: el hundimiento imprevisto del grupo terrorista apoyado por Israel en la Guta Oriental no augura nada bueno para la entidad sionista, que ve ahora como el Ejército sirio y Hezbolá se aproximan a Daraa para limpiar a continuación el Sur de Siria, incluyendo la zona límite con los Altos del Golán sirios ocupados.
“Cada vez que el Ejército sirio obtiene una victoria se produce una reacción israelí idéntica”, señala el periódico.
¿Por qué Tel Aviv ha errado el golpe?
Sin embargo, el escenario creado por el gobierno israelí sufre graves deficiencias, indica el diario.
“Existe una incoherencia en la versión que ha sido publicada y que revela la existencia de un reactor nuclear en Siria. Estas declaraciones no podrían convencer ni a un niño. Los israelíes buscan ahora inventar historias heroicas que les permitan restablecer un poco el equilibrio roto en particular después del derribo del F-16 y del hundimiento del proyecto terrorista que patrocinaban en Siria”, concluye el artículo firmado por Hassan Ahmed Hassan.
En realidad, el objetivo atacado por Tel Aviv no era más que una cantera empleada en la construcción y esto fue por lo que los servicios de inteligencia israelíes salieron a la palestra para desmentir la afirmación del gobierno. Esta falsa historia “heorica” ha sido, pues, creada sobre la ruina del prestigio de la “primera fuerza aérea de Oriente Medio” y no impresiona a nadie y menos a los iraníes, cuyos sitios nucleares están bien protegidos por defensas antiaéreas o enterrados bajo tierra y resultan así inaccesibles para Israel.
Source: Press TV