Los estudiantes que muestran su apoyo a los palestinos han instalado campamentos fuera de las universidades de Oxford y Cambridge en el Reino Unido, exigiendo un alto el fuego permanente en Gaza y que sus universidades rompan las relaciones con las instituciones israelíes que se benefician de la guerra genocida en Gaza.
La Universidad de Oxford del Reino Unido se ha convertido en el escenario del último campamento dirigido por estudiantes contra la guerra en Gaza.
Su espacio es limitado, el número de participantes está aumentando, casi todos con mascarillas, y hay un muro para que todos escriban sus pensamientos.
Todos están unidos en lo que quieren.
“Queremos una divulgación completa; queremos desinversión en este genocidio, en la ocupación y en el apartheid. Queremos boicotear, queremos que la universidad no utilice a Barclays como banco. Barclays tiene un papel muy importante y también está invirtiendo en este genocidio.”
Elevándose sobre el campamento, el Museo Pitt Rivers guarda entre sus paredes un inquietante tesoro de objetos “robados a pueblos colonizados en todo el mundo.”
Los estudiantes no están solos en su acción. Los miembros del cuerpo docente y del personal han emitido una declaración apoyándolos. Algunos aparecen brevemente en el campamento para mostrar su solidaridad.
Al igual que las manifestaciones pro Palestina de los últimos siete meses, los participantes también son una comunidad diversa, que protesta en paz y se siente segura en compañía de los demás.
“Soy judía y esto es cuando más segura me he sentido en esta universidad”, señaló una participante.
“Estoy muy cerca de mucha de la gente aquí. Cada día hago nuevos amigos con personas que comparten mi política, que comparten la importancia de la liberación para todas las personas. Y eso es tan hermoso e importante para mí.”
Se han establecido campamentos similares en otras universidades del Reino Unido, desde UCL hasta Manchester, Warwick y Cambridge.
Se han inspirado en las protestas universitarias en todo EEUU, en las que los estudiantes de la Generación Z tomaron el asunto en sus propias manos ante la inacción del gobierno.
Source: Press TV