En respuesta a los ataques de Kiev contra el territorio ruso, el ejército ruso respondió, intensificando los ataques contra la infraestructura militar, portuaria y energética de Ucrania que abastece al ejército ucraniano.
La semana pasada, el Ministerio de Defensa ruso informó de 12 ataques grupales con misiles y drones en toda Ucrania. En los últimos días ha aumentado la intensidad de los ataques rusos.
La noche del 25 de septiembre, la ciudad de Odessa fue objeto de uno de los ataques más poderosos de los últimos tiempos. El puerto marítimo del centro de la ciudad quedó casi completamente destruido. Se produjo un gran incendio en el edificio de un hotel local, que supuestamente albergaba a personal militar y era utilizado como cuartel general de las Fuerzas Armadas de Ucrania. Como resultado del ataque masivo en la región fueron destruidos el cuartel general del Comando Operacional Sur, la base de la Armada de Ucrania, las terminales portuarias y los talleres para la producción de drones de superficie. Por su parte, fuentes ucranianas informaron de la destrucción de un granero y almacenes de empresas locales.
Los misiles rusos también alcanzaron el aeropuerto militar de Dolgintsevo, situado en las afueras de Krivoy Rog. Allí tienen su base aviones de combate ucranianos armados con misiles británicos Storm Shadow. Como consecuencia del ataque, entre otras cosas resultaron dañadas las instalaciones de apoyo a los vuelos.
El intercambio de ataques entre Kiev y Moscú se asemeja a un juego de ping-pong, donde Rusia responde con una fuerza diez veces mayor, pero rara vez intensifica los ataques primero.
El 24 de septiembre, las fuerzas ucranianas lanzaron ataques masivos contra la ciudad de Tokmak en la región de Zaporiyia. Varios misiles fueron derribados por las fuerzas de defensa aérea rusas, pero otros impactaron en las calles de la ciudad, al menos un civil murió y al menos otros 11 resultaron heridos. Los bombardeos ucranianos también mataron a civiles en Novaya Kajovka y otros cinco resultaron heridos en Donetsk.
Ucrania lanzó ataques masivos con drones contra la ciudad rusa de Kursk, donde se iba a celebrar el Día de la Ciudad. Según los informes, uno de los drones impactó en una refinería cerca del aeródromo, y también resultaron dañados la estación de tren y un edificio administrativo. Un dron ucraniano fue derribado sobre el aeródromo militar de Halino, situado en las afueras de la ciudad.
Sólo en la noche del 25 de septiembre, el ejército ruso informó de la interceptación de 3 drones ucranianos sobre la región de Belgorod, otros 2 fueron derribados sobre la región de Kursk y 4 más cerca de Crimea.
Source: Southfront.press