Varios legisladores estadounidenses se unido al boicot de un próximo discurso del presidente israelí, Isaac Herzog, en el Congreso de EEUU, citando preocupaciones sobre las atrocidades y violaciones de los derechos humanos cometidas contra los palestinos por el régimen de ocupación.
El último miembro del Caucus Progresista del Congreso de EEUU (CPC, por sus siglas en inglés) que anunció que se saltaría el discurso de Herzog es Cori Bush, una representante demócrata de Missouri. Esto eleva el número total de legisladores que boicotearán el acto a cuatro.
En Twitter, Bush expresó su postura, afirmando que el régimen israelí impone un sistema de apartheid y abusa flagrantemente de los derechos de los palestinos. Ella enfatizó que el Congreso de EEUU no debería proporcionar una plataforma a un presidente que no muestra respeto por los derechos humanos.
Los miembros del CPC han sido críticos constantes de las políticas del régimen de ocupación en el pleno de la Cámara. Ilhan Omar, una congresista afroamericana, fue la primera en anunciar su decisión de boicotear el discurso de Herzog, declarando en Twitter que no tenía intención de asistir.
Siguiendo el ejemplo de Omar, otros miembros del CPC, incluidos Alexandria Ocasio-Cortez y Jamaal Bowman, también optaron por boicotear el evento.
La visita de Herzog a la Casa Blanca está programada para el 18 de julio e irá seguida de su discurso ante el Congreso al día siguiente, en conmemoración del 75 aniversario del establecimiento del régimen de ocupación.
En 2019, el régimen israelí prohibió que Omar y la congresista Rashida Tlaib visitaran los territorios ocupados debido a su apoyo a los derechos de los palestinos y a su pertenencia a un caucus antiisraelí.
Destacadas organizaciones de derechos humanos de todo el mundo han expresado su preocupación por el hecho de que el régimen israelí está adoptando cada vez más un sistema de apartheid, otorgando a los palestinos un estatus de segunda clase y tratando de mantener la hegemonía sionista desde el río Jordán hasta el mar Mediterráneo.
Bajo el gabinete de coalición extremista del primer ministro Benyamin Netanyahu, compuesto por partidos sionistas de extrema derecha que se oponen al estado palestino y apoyan la expansión de los asentamientos ilegales, la opresión de los palestinos por parte del régimen israelí se ha intensificado.
En los últimos meses, ha habido un aumento en los ataques israelíes contra pueblos y ciudades palestinos en los territorios ocupados, lo que ha resultado en numerosas muertes y arrestos de palestinos. Nablus y Yenín, en la Cisjordania ocupada, han sido un objetivo particular, ya que el régimen busca reprimir una creciente resistencia palestina contra la ocupación.
Uno de los objetivos de estas incursiones israelíes es la destrucción de las estructuras palestinas. Solo en 2023, más de 160 palestinos, incluidos 28 menores, han perdido la vida y muchos otros han sido arrestados como consecuencia de estos ataques israelíes.
Source: Agencias