El ex primer ministro israelí, Ehud Barak, advirtió que “Israel” se enfrenta a un “peligro real” y dijo que los israelíes deberían resistir el régimen actual, lo que demuestra una mayor escalada en la división política en el ámbito interno israelí.
Hablando en una conferencia en la que los líderes del movimiento de protesta de “Israel” se reunieron para abordar el golpe judicial del gabinete liderado por Netanyahu, Barak dijo que, así como los soldados tienen el deber de rechazar las órdenes ilegales, los israelíes están obligados a resistir a un régimen ilegítimo.
Barak dijo que “Israel” está en “peligro inmediato” de una dictadura inminente encabezada por el primer ministro Benjamin Netanyahu y llamó a los israelíes que se resistieran a “con todos los medios legítimos a su disposición”.
Mientras tanto, el líder de la oposición israelí, Yair Lapid, habló en la conferencia, y acusó al régimen actual de llevar a cabo un golpe de estado, describiéndolo como “una cuestión que ve más allá de la Corte Suprema o el Comité de Nombramientos Judiciales”, ya que supone “un ataque a nuestras familias, a nuestros hijos y a nuestra forma de vida”.
Miles de israelíes han estado celebrando manifestaciones masivas en los territorios ocupados en protesta contra un llamado plan de reformas judiciales propuesto por el gabinete de coalición de extrema derecha de Netanyahu, mientras los legisladores se preparan para votar sobre la primera lectura de la ley en el Parlamento del régimen.
Las reformas controvertidas propuestas darían a los políticos un mayor poder para nombrar jueces y más control de los nombramientos en el Tribunal Supremo.
Los opositores a las reformas de Netanyahu argumentan que los cambios legales amenazan la independencia de los jueces y debilitan la supervisión del gabinete gobernante y el parlamento. También dicen que el plan socavará los derechos de las minorías y abrirá la puerta a más corrupción.
A principios de enero, el ex ministro de Asuntos Militares israelí Benny Gantz y el ex primer ministro Lapid criticaron las políticas del nuevo gabinete, diciendo que Netanyahu sería responsable de una guerra interna.
En respuesta, un parlamentario de la Knesset, Zvika Fogel, pidió el arresto de Gantz y Lapid por “cargos de traición”.
Source: Press TV (traducido por el sitio de Al Manar en español)
