El crispamiento entre Argelia y Marruecos aumentó este miércoles después que ambos países intercambiaran acusaciones por la muerte de decenas de migrantes indocumentados que trataron de cruzar la cerca perimetral en la ciudad autónoma de Melilla.
A fines de ola semana pasada unos dos mil migrantes ilegales trataron de cruzar por tierra hacia el enclave hispano en África, pero fueron repelidos por policías marroquíes y españoles con saldo inicial de 23 muertos, revisado al alza hasta 37 víctimas fatales en las últimas horas.
El régimen marroquí no tiene el coraje de soportar la vergüenza (…) siempre busca un chivo expiatorio para eludir sus responsabilidades, declaró a la prensa el Enviado Especial para el Magreb y el Sahara Occidental de la cancillería argelina, Amar Belani.
El Magreb (Poniente en árabe) es una subregión de África que incluye a Argelia, Libia, Mauritania, Marruecos, Sáhara Occidental y Túnez.
De su lado, las autoridades marroquíes aseguraron que 140 de sus gendarmes resultaron heridos en los choques con los indocumentados (que) se infiltraron a través de la frontera entre su país y Argelia.
Añadieron que “la extrema de la violencia de los asaltantes y su estrategia denota un alto sentido de organización y una estructura jerárquica de líderes entrenados con perfiles de militares en zonas de conflicto”, insinuación que responsabiliza a Argelia con el incidente.
Las relaciones entre ambos tiene una historia de conflicto y son inexistentes desde que Argelia rompió nexos diplomáticos en agosto del año pasado tras acusar al reino alauí de apoyar a separatistas bereberes acusados de iniciar una serie de catastróficos incendios forestales en la región norteña de la Cabilia.
La reciente decisión del gobierno español de reconocer la soberanía marroquí sobre el Sáhara Occidental provocó que Argelia suspendiera el tratado de amistad y congelara el comercio con el país europeo.
Source: Prensa Latina