Según el periódico estadounidense The Wall Street Journal, la reciente reunión entre el príncipe heredero de Arabia Saudita, Mohammad bin Salman, y el asesor de seguridad nacional de EEUU, Jake Sullivan, “no fue amistosa”.
The Wall Street Journal informó que “el príncipe heredero saudí, Mohammed bin Salman, se reunió con el asesor de seguridad nacional de EEUU, Jake Sullivan, en septiembre pasado en pantalones cortos y le gritó en la cara cuando Sullivan planteó el tema del asesinato de Yamal Khashoggi.
También según el periódico estadounidense, “los funcionarios estadounidenses dicen que las diferencias políticas se han profundizado desde la operación militar rusa en Ucrania. La Casa Blanca quería que los saudíes “produjeran más crudo para mantener estables los precios del petróleo y dañar la capacidad de Moscú para financiar la guerra, mientras que el reino decidió no cambiar su producción, una decisión que resultó ser útil para los intereses rusos.”
El WSJ también reveló que MBS quiere que “el presidente de EEUU, Joe Biden, lo reconozca como el gobernante de facto de Arabia Saudí y el futuro rey, porque ahora dirige los asuntos cotidianos del país, en nombre de su padre”. El rey Salman está enfermo, pero Biden aún no se ha reunido con MBS ni ha hablado con él directamente.”
Según funcionarios estadounidenses, “el peligro es que Riad pueda alinearse más estrechamente con China y Rusia, o al menos permanecer neutral en temas de vital importancia para Washington, como ha hecho con la crisis de Ucrania”.
Según un alto funcionario estadounidense, “la Casa Blanca ha dejado de pedir a los saudíes que produzcan más petróleo en los mercados mundiales. En cambio, los estadounidenses le pidieron a Arabia Saudí que no hiciera nada que pudiera dañar los esfuerzos occidentales en Ucrania”.
El periódico concluyó que “el rey Salman y Mohammad bin Salman mantuvieron una serie de reuniones durante el año pasado para considerar las medidas punitivas que Biden podría tomar contra el reino y la posibilidad de consentir y liberar a los detenidos políticos, pero MBS amenazó con fortalecer las alianzas con Rusia y China.”
El periódico también reveló que “el secretario de Estado de EEUU, Anthony Blinken, rechazó en julio pasado una solicitud del viceministro de Defensa saudí, Jalid bin Salman, para reunirse con él en Washington, pero luego se reunieron por un breve tiempo”.
Por el contrario, Arabia Saudí rechazó en febrero pasado una solicitud del funcionario de la Oficina de Oriente Medio del Consejo de Seguridad Nacional de EEUU, Bert McGrook, para “liberar a Mohammad bin Nayef (ex príncipe heredero del país) y su tío Ahmed bin Abdulaziz”.
Source: WSJ