El embajador de Irán ante las Naciones Unidas, Majid Takht-Ravanchi, dice que los funcionarios israelíes deben ser llevados ante la justicia por “perpetrar crímenes atroces” contra el pueblo palestino en flagrante violación del derecho internacional.
Al dirigirse a la sesión del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas sobre “protección de civiles en conflictos armados” el martes, el diplomático iraní dijo que funcionarios israelíes han demolido recientemente 847 estructuras de propiedad palestina, incluyendo viviendas, activos de saneamiento y 156 edificios donados como ayuda humanitaria, y desplazaron al menos 996 palestinos en la ocupada Cisjordania.
Añadió que los palestinos están experimentando un desplazamiento forzado a gran escala de sus hogares y territorios, y que se estima que alrededor de 90.000 palestinos corren el riesgo de ser desalojados en la ocupada Jerusalén Oriental (Al Quds).
“Lo peor es que cuando los palestinos protestaron contra este desalojo forzoso ilegal, incluyendo en (el barrio de) Sheij Yarrah, donde han vivido durante generaciones, y contra los ataques a los fieles musulmanes en la Mezquita de al Aqsa durante el mes sagrado de Ramadán, las fuerzas militares y de seguridad israelíes cometieron los crímenes más brutales contra los palestinos”, afirmó Takht-Ravanchi.
Señaló el reciente ataque militar israelí contra la Franja de Gaza sitiada, y afirmó que, además de matar a cientos de personas, incluidos 66 niños y 39 mujeres, las fuerzas israelíes también destruyeron o dañaron 30 instalaciones de salud, casi 50 escuelas y centros educativos, alrededor del 50 por ciento de las instalaciones de agua así como 33 oficinas de medios y 43 mezquitas durante los 12 días de agresión brutal.
“Tales crímenes que violan materialmente las normas y principios fundamentales del derecho internacional e implican la responsabilidad internacional del régimen israelí, cuyos responsables, por lo tanto, deben ser llevados ante la justicia por cometer crímenes tan atroces”, dijo Takht-Ravanchi.
Al menos 253 palestinos, incluidos 66 niños, murieron en el bombardeo israelí del enclave costero densamente poblado. El bombardeo de “Israel” también provocó una devastación generalizada en el territorio.
Source: Press TV