El presidente venezolano, Nicolás Maduro, reafirmó el compromiso inquebrantable de su nación con la paz, la soberanía y la dignidad, al presentar un nuevo plan para fortalecer la defensa territorial, en medio de informes sobre la reanudación de la actividad encubierta estadounidense en la región.
En un discurso televisado el miércoles, Maduro declaró el establecimiento de Zonas de Defensa Integral a lo largo de la frontera occidental del país con Colombia, incluyendo los estados de Táchira, Apure y Amazonas, áreas consideradas vitales para la seguridad nacional y la estabilidad regional.
“Venezuela continúa construyendo la paz ejerciendo plena soberanía y defendiendo el derecho a la vida y la alegría de su pueblo”, declaró el presidente. “Somos un ejemplo de dignidad, coraje y trabajo duro, un pueblo decidido a vivir en paz y a defender nuestra patria con honor”.
El jefe de Estado elogió los avances logrados bajo su gobierno, a pesar de las presiones externas, y enfatizó que la perseverancia de Venezuela la ha convertido en “una nación modelo” para otros países del Sur Global.
Llamó a la ciudadanía y a las Fuerzas Armadas a mantenerse en alerta máxima, instando a la máxima movilización y preparación en los próximos días para salvaguardar las fronteras del país.
“Debemos multiplicar nuestros esfuerzos”, afirmó. “La soberanía no es un eslogan. Es un deber activo, y cada venezolano debe participar en su defensa”.
El presidente describió las nuevas zonas de defensa como “ejemplos de desarrollo y resistencia”, diseñadas para fortalecer la coordinación entre el ejército, las milicias bolivarianas y las comunidades locales para contrarrestar cualquier amenaza externa o encubierta.
“Cada día nos superamos, nos preparamos para la defensa y fomentamos una resistencia popular creativa y consciente”, afirmó Maduro.
Estas declaraciones se produjeron pocas horas después de que The New York Times informara que el gobierno del presidente estadounidense Donald Trump había autorizado en secreto operaciones encubiertas de la CIA contra Venezuela, incluyendo la posibilidad de ataques mortales en territorio venezolano.
El supuesto plan, aprobado en 2024, marca una grave escalada en la prolongada campaña de Washington para desestabilizar la República Bolivariana, según el informe, que cita fuentes anónimas.
Según la investigación, la autorización encubierta se extiende más allá de los anteriores ataques estadounidenses a buques frente a las costas de Venezuela, incidentes oficialmente justificados bajo operaciones antinarcóticos, pero que han causado al menos 27 muertes.
El supuesto objetivo, según las fuentes, seguía siendo el derrocamiento del gobierno venezolano.
Source: Diversas