Tres mujeres libanesas intervinieron ante el Congreso de EEUU para comentar sobre los últimos acontecimientos libaneses y especialmente para aconsejar a los estadounidenses en su lucha contra Hezbolá. Hanine Gaddar, periodista e investigadora, Carla Hammoud, analista para asuntos de Oriente Medio, y Mona Yaakobiane, quien es asesora para asuntos de Siria, Oriente Medio y África del Norte en el Centro Americano para la Paz.
Sus intervenciones tuvieron lugar junto al discurso de Jeffrey Feltman, ex embajador de EEUU en Líbano, en el que sugirió que los libaneses tienen dos opciones: seguir las políticas de Washington o el caos y advirtió sobre el papel de Irán, Rusia y China en el Líbano.
Las tres, en referencia a las protestas en el Líbano desde el 17 de octubre para condenar la corrupción y el deterioro de la situación económica, aconsejaron a los estadounidenses sobre la mejor manera de explotar estas protestas para “debilitar a Hezbolá”.
En cuanto a Hanine Gaddar, fue editora en jefe de la página en inglés del sitio web de noticias libanés Now Lebanon. También es investigadora visitante del Instituto de Washington para las Políticas del Cercano Oriente, una institución pro-israelí.
En mayo de 2014, participó en una conferencia organizada por el mencionado Instituto de Washington y organizada por el ex primer ministro israelí Ehud Barak.
Más tarde se sentó en la misma plataforma con el ex oficial del Mossad israelí Nadaf Pollak, quien también trabaja para en el Instituto y con quien habló sobre las repercusiones militares y políticas de la participación de Hezbolá en Siria. En ambos casos, ella violó la ley libanesa que prohíbe todo contacto con israelíes.
Ella es conocida por sus posiciones pro israelíes.
“Todos estaban felices cuando Israel invadió Líbano en 1982 y los israelíes fueron muy bienvenidos al principio. No tuvimos ningún problema con ellos”, dijo Gaddar, citada por el periódico libanés Al Akhbar, en una reunión con el periodista estadounidense Michal Jay Toten, conocido a través de sus artículos por sus posiciones pro israelíes y cercano a los extremistas neocon.
Cabe recordar que en aquel año Israel invadió el Líbano y sometió a la capital, Beirut, a un cerco y bombardeo durante varias semanas.
Sobre Hezbolá, ella adopta una retórica donde se mezclan las mentiras, omisiones, exageraciones y fabricaciones.
“Sólo un gobierno de tecnócratas disfrutará de la confianza del pueblo libanés y permitirá restablecer la ayuda internacional”, afirmó.
“Hezbolá teme un gobierno de tecnócratas porque la primera medida que adoptaría sería la de excluirlo”.
Ella añadió que Hezbolá había respondido a las manifestaciones de protesta con amenazas y que atravesaba una crisis financiera por las sanciones estadounidenses contra Irán.
También afirmó que “Hezbolá ha usado su influencia en ciertas instituciones del Estado y en varias unidades del Ejército libanés para reprimir las manifestaciones”.
Ella dijo que había que presionar al presidente Michel Aoun para que convoque consultas parlamentarias inmediatas y se celebren elecciones legislativas.
También afirmó que había que penalizar a los aliados de Hezbolá como Michel Aoun, Nabih Berri y Gebran Bassil, a los que acusó de “corrupción” y también imputarles “la responsabilidad de la crisis actual y la degradación de la situación de seguridad”.