El régimen saudí y sus aliados lanzaron hace dos semanas una amplia ofensiva contra la capital yemení, Sanaa, con el fin de apoderarse de la misma. Esta ofensiva terminó en un gran fracaso y dio lugar a una contraofensiva del Ejército yemení y sus aliados de Ansarulá. La amplitud de la derrota de Riad y sus aliados fue tal que el Estado Mayor del Ejército saudí ordenó que los oficiales saudíes a cargo de esta ofensiva fueran sometidos a interrogatorios. ¿Acaso hay espías de Ansarulá en el cuartel general de las fuerzas de ocupación?
La ofensiva saudí buscaba en efecto realizar un avance hacia Sanaa por el noroeste. La región estratégica de Nihm era el objetivo principal de esta ofensiva, pero las cosas no se produjeron como Riad las deseaba. En lugar de conquistar nuevas localidades, la coalición perdió varias que había ocupado a finales de 2017. Peor aún, los combatientes de Ansarulá lograron infiltrarse en el cuartel general del enemigo y capturaron a varios altos oficiales saudíes y yemeníes al servicio de los saudíes, infligiendo además a las fuerzas de Bin Salman y sus mercenarios fuertes pérdidas, que han venido a ser contabilizadas en unos 140 muertos.
Los expertos militares califican esta victoria del Ejército yemení y de Ansarulá “no tiene precedentes” en la medida en que varios oficiales norteamericanos e israelíes asesoraban a sus homólogos saudíes y emiratíes en el desarrollo de las operaciones. Los comandantes que han evitado la captura están ahora sometidos a interrogatorios y culpados por la derrota que ellos han sufrido a manos de las fuerzas yemeníes.
La batalla de Nihm ha tenido la singularidad de movilizar a las fuerzas de comandos yemeníes. La contraofensiva, protagonizada por estos últimos, ha sido lanzada en tres ejes.
En el eje de Al Yirsheb, donde las posiciones de la coalición y los mercenarios fueron tomadas al asalto antes de caer en manos de Ansarulá, el sector ocupado que une Gul Sahab con los montes ocupados de Rayain fue también liberado.
La contraofensiva también permitió a los comandos de Ansarulá a la ruta que une Tahnun con Adén. Varias localidades fueron también liberadas en esta área
El segundo eje se situó en la localidad de Yaam y allí también las fuerzas yemeníes lograron expulsar a la coalición y sus mercenarios de Al Suweida y Al Bazi así como de los montes Hassin. La batalla en las montañas es una especialidad de los combatientes de Ansarulá. Las operaciones se extendieron también a los montes Bayad con el telón de fondo de la liberación de Ayash.
En el tercer eje ha visto a las fuerzas yemeníes lanzar un ataque contra las posiciones de la coalición y sus mercenarios en los montes Aida-Sharqiya, Aida Qarbiya y Al Mansaa y allí también los ocupantes emprendieron la huida.
Desde hace 15 días, el régimen saudí y sus aliados han multiplicado los contraataques para recuperar el terreno perdido, sin éxito. El cuartel general de la coalición, donde los oficiales norteamericanos e israelíes tienen una presencia cada vez más activa, no pueden digerir esta derrota, sobre todo porque va acompañada de un crecimiento de los ataques balísticos de Ansarulá.
En represalia por estos reveses militares, que demuestran el éxito yemení en una táctica de guerra asimétrica después de tres años de guerra, Riad ha descargado su ira sobre la población civil bombardeando Sadaa, Hudaida y Hayyah.
Source: Agencias