A la luz de los continuos ataques sionistas contra el Líbano y la escalada de los ataques que superaron los 26 ataques aéreos en una noche, crecen los temores de una política de escalada sistemática seguida por Tel Aviv sin ninguna disuasión internacional. A pesar de la gravedad de estas violaciones, la posición del Comité de Supervisión encargado de la aplicación de la Resolución 1701 permanece en silencio, lo que plantea interrogantes sobre el alcance del compromiso de las partes internacionales con la protección de la soberanía libanesa.
En este contexto, el general de brigada retirado Dr. Hassan Juni confirmó al sitio de Al-Manar que “las violaciones israelíes continúan, se intensifican y se desarrollan en direcciones hostiles, hasta el punto de que Israel está actuando en el Líbano como si estuviera en un estado de guerra por un lado, especialmente después del gran cantidad de ataques militares —más de 26 ataques en una sola noche— en todo el territorio libanés, y en su interior, además de los ataques selectivos dirigidos contra individuos”. Todo esto indica que Israel continúa la guerra sin respetar ninguna firma ni compromiso”.
El general de brigada Juni añadió: «Lo extraño es este silencio correspondiente del Comité de Supervisión, responsable de supervisar y controlar la implementación de la Resolución 1701. Este comité parece ser indulgente con este asunto, como si aceptara lo que Israel hace, de conformidad con un supuesto acuerdo o un documento de garantía específico entre Israel y EEUU».
Subrayó que “el Estado debe realizar intensos esfuerzos diplomáticos y trabajar para desarrollar estos esfuerzos en una dirección más amplia, porque si EEUU es el patrocinador y jefe del comité, y si aceptó y aprobó estas garantías y quizás es un socio en ellas, entonces el Estado libanés y su maquinaria diplomática deben ir más allá de EEUU, intensificar sus esfuerzos, alzar la voz, recurrir al Consejo de Seguridad y a las Naciones Unidas, y presentar denuncias al respecto”.
El general de brigada Juni también expresó su sorpresa por la falta de una posición oficial libanesa sobre estas violaciones, considerando que “la falta de una voz oficial de objeción del gobierno libanés es sorprendente, ya que no refleja la gravedad de la violación”. Pero, en cualquier caso, debemos esperar un poco y darles el debido valor a estos esfuerzos, ya que pueden dar frutos más adelante”.
Continuó explicando que “la lucha contra el enemigo israelí se basa en un principio fundamental, que es la posesión de fuerza y capacidad, porque este enemigo no respeta ninguna resolución ni ley internacional. La prueba de ello es lo que está sucediendo en Siria.
Concluyó diciendo: «La situación es muy difícil. Toda la región está cambiando. La postura regional e internacional no ayuda en absoluto. Al contrario, las condiciones regionales e internacionales son favorables para que Israel consiga sus ambiciones». Sin embargo, el recurso a la fuerza debe reconsiderarse y estudiarse después de esta guerra y sus resultados. “Por lo tanto, los esfuerzos diplomáticos deben tener un alcance más amplio, y se debe dar al Pacto la oportunidad de ver cómo se pueden abordar estos asuntos”.
Source: Al Manar