El pueblo palestino enfrenta heroicamente la agresión israelí el lunes, tercer día de la histórica batalla de Inundación de Al-Aqsa. Han pasado más de 48 horas de la operación sorpresa y, a pesar de las brutales incursiones israelíes, los combatientes de Gaza siguen combatiendo en los asentamientos israelíes fronterizos con Gaza en una incursión sin precedentes en los territorios palestinos desde que fueron ocupados en 1948.
El ejército de ocupación israelí anunció el lunes que los combates con los combatientes de la resistencia palestina todavía continuaban en siete u ocho lugares alrededor de la Franja de Gaza dentro de los territorios ocupados.
“Seguimos luchando. Hay entre siete y ocho lugares alrededor de Gaza (donde) todavía tenemos soldados que luchan contra los terroristas”, dijo a los periodistas el portavoz militar israelí, Richard Hecht.
“Pensábamos que ayer tendríamos el control total”, añadió, esperando que el ejército de ocupación “lo tenga al final del día”.
Mientras tanto, la municipalidad de Sderot ordenó a los colonos israelíes que se encontraban allí permanecer encerrados en sus hogares por “temor a un incidente de seguridad”.
El Times of “Israel” informó entonces que las fuerzas de ocupación israelíes entablaron un tiroteo con varios combatientes de Hamas en una piscina municipal de Sderot. También se informaron de víctimas.
Masacres brutales
Por otro lado, las fuerzas de ocupación continuaron su agresión contra Gaza, con múltiples nuevas masacres que causaron decenas de muertos y heridos.
A última hora del domingo y principios del lunes se renovaron las incursiones en las regiones nororiental y noroccidental de Gaza, dirigidas contra hogares de ciudadanos, mezquitas e instituciones públicas con bombardeos violentos e indiscriminados utilizando misiles.
En los bombardeos también se atacó a la familia Abu Hilal en Rafah, lo que provocó varios mártires y heridos. Los informes sugieren que hasta 18 personas han muerto en este ataque y algunas siguen desaparecidas bajo los escombros.
Además, un centro local en la gobernación de Jan Yunis fue atacado y mataron en él a cinco ciudadanos palestinos.
Otras zonas de Gaza también se vieron afectadas por la agresión israelí, siendo el objetivo la casa de la familia Fayyad en Deirah y una casa en la zona de Canaan en Beit Lahia.
Mientras tanto, los equipos de defensa civil continuaron trabajando para sacar a los heridos de debajo de los escombros de las casas y otras zonas objetivo.
Barcos israelíes también dispararon proyectiles hacia las costas de la ciudad de Gaza durante la última ola de bombardeos. Los equipos de ambulancia luchaban por llegar a los lugares bombardeados debido a la intensificación de los ataques, con varias carreteras principales destruidas.
Por su parte, el Ministerio de Salud palestino en el enclave sitiado cifró el número de mártires en 436, incluidos 91 niños y 61 mujeres. Anunció que el número de heridos se acercaba a los 2.300.
Esto se produce cuando los medios israelíes confirmaron que el número de muertes israelíes aumentó a más de 700. El Ministerio de Salud de la entidad sionista anunció que hasta el lunes por la mañana 2.382 israelíes “han sido tratados en hospitales de “Israel” por las heridas que sufrieron en la guerra”.
“22 de ellos se encuentran en estado crítico, mientras que 345 están gravemente heridos”, añadió el ministerio.
Source: Medios palestinos e israelíes