Con motivo del 47.º aniversario de la desaparición del Imam Sayyed Musa Sadr y sus dos compañeros, el presidente del Parlamento libanés, Nabih Berri, reafirmó su disposición a debatir el tema de las armas —”nuestro orgullo y nuestro honor”—, pero solo en el marco de un diálogo nacional sereno y consensuado, de conformidad con la Constitución.
El presidente Berri rechazó firmemente cualquier intento de imponer resultados “bajo amenazas, la erosión del Pacto Nacional, las violaciones constitucionales o los intentos de desmantelar el acuerdo de alto el fuego”.
Homenaje a la Resistencia y sus Mártires
Berri rindió homenaje a todos los mártires, en particular a los caídos en la última agresión israelí contra el Líbano, y saludó al secretario general de Hezbolá, Sayyed Hasan Nasralá, describiéndolo como un compañero de toda la vida en el camino de la resistencia.
Subrayó que el Líbano ha implementado plenamente la Resolución 1701 del Consejo de Seguridad de la ONU, mientras que “Israel” ha violado flagrantemente todas sus disposiciones, tanto política como militarmente.
En cuanto a los asuntos internos, el presidente Berri defendió la postura de los ministros de la alianza Amal-Hezbolá, afirmando que sus acciones eran “nacionales, no sectarias”, y estaban motivadas por la preocupación por la estabilidad del país. Condenó los intentos de convertir en chivo expiatorio al Ejército Libanés, al que llamó “el escudo y bastión de la nación, ahora y siempre”.
Rechazo de la propuesta estadounidense como alternativa al alto el fuego
Sobre la última propuesta diplomática estadounidense, Berri la rechazó de plano, afirmando que el llamado “documento estadounidense” no respeta el principio de limitar el armamento al Estado y, en cambio, pretende sustituir el acuerdo de alto el fuego vigente. Subrayó que el enemigo israelí ha ignorado por completo la propuesta mientras expande su presencia en el sur del Líbano.
Además, Berri advirtió sobre la peligrosa convergencia de la ignorancia y el extremismo, calificándola de “camino directo a la ruina nacional”. También condenó el aumento del discurso de odio, culpando a algunos medios de comunicación de “ofrecer plataformas para la incitación y la división”. Reafirmando su postura, Berri declaró: “Somos defensores de la unidad y la cooperación, nada más”.
Sin concesiones sobre el Imam Sadr
Al abordar el caso en curso de la desaparición del Imam Musa al-Sadr, Berri afirmó con firmeza: “No negociaremos ni perdonaremos”. Acusó a las autoridades libias actuales de obstruir los esfuerzos judiciales libaneses, afirmando que su falta de cooperación “levanta serias sospechas y las coloca directamente en el círculo de la complicidad”.
Apoyo al discurso inaugural del presidente Aoun
Berri reafirmó su apoyo al contenido del discurso inaugural del presidente Joseph Aoun y reiteró su disposición a entablar un diálogo nacional constructivo sobre el futuro de las armas en el Líbano, siempre que se base en el consenso.
El presidente del Parlamento libanés concluyó advirtiendo que las “mentes demoníacas” representan una amenaza mayor para el Líbano que las armas de la resistencia, que liberó los territorios ocupados. Añadió que el Líbano sigue siendo blanco del llamado proyecto “Gran Israel”, y preguntó: “¿No es la reciente visita del Jefe del Estado Mayor sionista al sur del Líbano un insulto a nuestra soberanía?”.
Source: Al Manar