Este miércoles 19 de julio, el ministro de Justicia de Francia, Éric Dupond-Moretti, dio cifras. Un total de 1.056 personas han sido condenadas a prisión, incluidas 742 a una pena firme, por los pasados disturbios, según él.
Las protestas en Francia comenzaron el 27 de junio de este año después de que un policía matara a un joven de 17 años en Nanterre.
En entrevista radial, al tiempo que valoraba la rápida celebración de los juicios a los detenidos, Éric Dupond-Moretti declaró que 742 personas fueron condenadas a prisión.
Después de cuatro noches de feroces combates, estas protestas fueron contenidas con el despliegue de vehículos blindados y alrededor de 45.000 efectivos de las fuerzas de seguridad, incluidos policías especialmente capacitados y fuerzas coercitivas.
En referencia a los veredictos dictados contra los manifestantes, Moretti explicó que “más del 95% de los acusados han sido declarados culpables de varios delitos, entre ellos vandalismo, robo, incendio provocado o atentado contra la policía y las fuerzas de seguridad”, según Sputnik.
Muchos sospechosos comparecieron de inmediato, lo que generó preocupación entre los abogados de los acusados sobre la imparcialidad del proceso judicial y las duras sentencias a los detenidos.
El ministro de Justicia de Francia dijo que aunque las sentencias de prisión cortas generalmente se pueden conmutar por sentencias no privativas de libertad, generalmente con el uso de pulseras electrónicas, unas 600 personas han sido enviadas a prisión hasta el momento.
Según las estadísticas del gobierno francés, la edad promedio de más de 3.700 detenidos fue de solo 17 años, lo que provocó que los menores comparecieran ante los tribunales de menores.
“Pedí a los fiscales una respuesta sistemática y firme y, siempre que fue posible, pedí que los perpetradores fueran llevados ante los tribunales”, subrayó el ministro de Justicia francés.
Éric Dupond-Moretti también apuntó que el otro objetivo era “recordar a los jóvenes que Snapchat no es un escondite, y que podemos, como dicen, “entrar en las cuentas”, y que cuando dos chavales llaman para concertar una cita y apuntar a un objetivo, podemos encontrarlos. Y además, se hizo, y se emitieron condenas.
Y el ministro de Justicia seguía insistiendo en subrayar “la responsabilidad de los padres”. “A los padres que pueden ejercer la patria potestad, no lo hacen y ponen en peligro la educación de sus hijos, se les aplicará un texto que existe en el Código Penal y que permite sancionar”.
“Por supuesto que no se trata de castigar a una madre que trabaja de noche y cría sola a su hijo. La sistematización nunca es buena. Es caso por caso”, matizó entonces Éric Dupond-Moretti. “Recordé también las obligaciones civiles de los padres, porque deben saber que son ellos quienes pagan la factura de los daños que cometen sus hijos”. “El Estado no es responsable de todo y no puede ser responsable de todo”, concluyó.
Source: Agencias