Siria e Iraq están en conversaciones para reactivar el oleoducto estratégico Kirkuk-Banias, reveló el ministro de Comercio iraquí, Azir al-Gurairi, en una entrevista con Sputnik que se publicó el 5 de mayo.
El ministro le dijo a la agencia de noticias rusa que discutió el asunto con el ministro de Petróleo de Siria, Firas Kaddur, a principios de este mes.
La reactivación del oleoducto Kirkuk-Banias será “crucial” para Siria, ya que pondría fin a la crisis energética del país, dijo el ministro, y agregó que el oleoducto tiene una “importancia exponencial” para Iraq, ya que podría reducir el costo de exportación de su petróleo.
Azir dijo que las evaluaciones iniciales indican que el oleoducto, que sufrió graves daños durante la guerra en Siria y los conflictos recientes en Iraq, necesita un mantenimiento extenso con un alto costo. Según el ministro, un posible escenario para solucionar este problema es que cada país asuma el costo de reparar el daño en su parte del oleoducto.
El oleoducto de 800 kilómetros de largo, que puede transportar 0,3 millones de barriles de petróleo por día, fue construido por la American Bechtel Corporation.
El oleoducto entró en funcionamiento en 1952. Entre 1982 y 2000, Iraq cerró el oleoducto debido al apoyo sirio a Irán durante la guerra Irán-Iraq y su posterior apoyo a la campaña de liberación de Kuwait. Durante la invasión de Iraq en 2003, el oleoducto fue dañado por los ataques aéreos de EEUU y permaneció fuera de servicio desde entonces.
Siria e Iraq hicieron varios intentos de reactivar el oleoducto estratégico entre 2007 y 2010. Sin embargo, obstáculos técnicos y políticos mantuvieron cerrado el oleoducto.
La reactivación del oleoducto reducirá el costo de producción de petróleo de los campos del norte de Iraq, que contienen alrededor del 12% de las reservas del país, así como el costo de exportación del petróleo. También ayudará a Iraq a aumentar su producción al permitirle el acceso a las refinerías de petróleo en Siria. Esto contribuiría en gran medida al plan del país de aumentar la producción de petróleo a ocho millones de barriles por día para 2027.
La exportación de petróleo iraquí a través de los puertos sirios podría poner fin a la crisis energética del país, provocada por la ocupación estadounidense de los campos clave de petróleo y gas. También podría ayudar a reactivar los puertos sirios en el Mar Mediterráneo.
Es probable que los esfuerzos sirios e iraquíes para reactivar el oleoducto Kirkuk-Banias enfrenten varios obstáculos, principalmente sanciones impuestas por EEUU y la Unión Europea. Sin embargo, el reciente acercamiento de Siria con aliados regionales clave de Occidente, incluida Arabia Saudí, las relaciones especiales de Iraq con Irán y la actual crisis energética mundial podrían permitir que los dos países lleguen a un acuerdo sobre el oleoducto.
Source: southfront.org