El Papa León XIV finaliza el martes una visita de tres días al Líbano, culminando así su viaje apostólico de seis días al Líbano y Turquía.
El pontífice partió de Beirut tras una ceremonia oficial de despedida en el Aeropuerto Internacional de Beirut, a la que asistieron el presidente Joseph Aoun, el primer ministro Nawaf Salam y el presidente de la Cámara de Representantes, Nabih Berri.
“Su Santidad, esta visita quedará grabada en la memoria del Líbano y su pueblo”, declaró el presidente Aoun al despedirse del Papa.
“Hemos escuchado su mensaje y seguiremos haciéndolo presente, y esperamos estar siempre presentes en sus oraciones”, añadió el presidente libanés.
El Papa esperaba “involucrar a todo Oriente Medio en este espíritu de fraternidad y compromiso con la paz, incluyendo a quienes actualmente se consideran enemigos”.
Y extendió saludos a todas las regiones del Líbano, incluyendo aquellas que no pudo visitar: “Trípoli y el norte, la Beqaa y el sur del país, que actualmente vive un estado de conflicto e incertidumbre”.
Al pedir el fin de las hostilidades, dijo: “Debemos reconocer que la lucha armada no aporta ningún beneficio. Si bien las armas son letales, la negociación, la mediación y el diálogo son constructivos. ¡Elijamos todos la paz como un camino, no solo como un objetivo!”.
El Papa invocó además las palabras de San Juan Pablo II: “¡El Líbano es más que un país; es un mensaje!”.
Oración en Silencio
El martes por la mañana, el Papa León recitó una oración en silencio ante el muro conmemorativo que lleva los nombres de los 245 mártires y víctimas de la explosión del puerto de Beirut del 4 de agosto.
A continuación, saludó y estrechó la mano de las familias de las víctimas. A continuación, se celebró una misa de celebración en el paseo marítimo de Beirut, donde el Papa León XIV instó al pueblo libanés a mantener la gratitud a pesar de las adversidades de la vida, diciendo: «A veces, bajo el peso de las dificultades de la vida, tendemos a rendirnos en lugar de agradecer. Les insto, pueblo libanés, a mantener siempre un espíritu de gratitud».
The last big event of Pope Leo’s first apostolic journey abroad was presiding over Mass at Beirut’s Waterfront. Pope Leo expressed his gratitude for the joyful welcome he received in the country, praising God for allowing him to visit.
Despite the difficult situations many… pic.twitter.com/DsUcvlXpIE
— Vatican News (@VaticanNews) December 2, 2025
Continuó: “Estamos llamados a no desesperar”. Reconociendo las profundas dificultades del Líbano, señaló que “esta belleza se ve eclipsada por la pobreza, el sufrimiento, la inestabilidad política, la crisis económica, la violencia y el conflicto”.
El Papa concluyó con un poderoso llamado: “No desesperen. Digo al Líbano: ¡Levántense y sean un signo de paz en Oriente!”.
Source: Medios libaneses



