El personal del Parlamento iraquí ha vuelto a trabajar por primera vez desde finales de julio, mientras varias facciones acordaron mantener un diálogo nacional para resolver un estancamiento político y un vacío de liderazgo en el país árabe.
“Todo el personal del Parlamento ha vuelto al trabajo”, siguiendo las órdenes emitidas el sábado por la noche, dijo un funcionario anónimo.
“Las operaciones en el Parlamento se habían suspendido desde que los manifestantes asaltaron el edificio de la legislatura”, agregó.
El desarrollo se produjo cuando el presidente del Parlamento Mohammed al-Halbusi sugirió una agenda para una próxima sesión de diálogo nacional.
En un comunicado publicado en Twitter el domingo, Halbusi sugirió una agenda para una segunda sesión de diálogo nacional, luego de una ronda anterior que se llevó a cabo el 17 de agosto.
Halbusi también dijo que deberían “fijar una fecha para elecciones parlamentarias anticipadas” y discutir la elección de un nuevo presidente y la formación de un gobierno.
Las tensiones se han acumulado en Iraq en medio de una crisis política que ha dejado al país sin un nuevo gobierno durante meses. La violencia estalló el lunes de la semana pasada cuando los partidarios iraquíes del destacado clérigo chií Muqtada al-Sadr irrumpieron en el Palacio de gobierno dentro de la Zona Verde después de que su líder anunciara su renuncia a la política.
Los partidarios de Al-Sadr se retiraron el martes de la Zona Verde de alta seguridad de Bagdad después de que este exigiera el fin de dos días de disturbios que dejaron 30 muertos y cientos de heridos.
Al-Sadr había dado a sus seguidores “60 minutos” para retirarse, después de lo cual “desautorizaría” a los que quedaran.
Source: Press TV