Tras la liberación de la ciudad de Darayya debido a la rendición de los militantes al Ejército sirio un soplo de libertad ha llegado para las minorías de la ciudad, en especial para los cristianos, que han podido celebrar su primera misa en cinco años en los que la ciudad estuvo en las manos de fanáticos terroristas takfiris wahabíes, apoyados por Occidente y Arabia Saudí.
El patriarca ortodoxo griego de Siria celebró con tal motivo una misa en la Catedral Ortodoxa de la ciudad el pasado domingo. Durante la misa, el obispo y patriarca asociado del Patriarcado de Antioquia, Lucas Khoury, pidió por la paz en Siria y el alma de los mártires de la ciudad, incluyendo a muchos cristianos que fueron ejecutados por los terroristas.
Khoury dijo en la homilía que los sirios están detrás del Ejército y el Liderazgo sirio en su lucha contra todas las formas de terrorismo.
Él envió el mensaje “a los europeos y los norteamericanos y a todos los perversos que trajeron a estos criminales que destruyen y saquean nuestro país” y les pidió que “pongan fin a su apoyo a los mismos”.
También dijo que los cristianos de Siria y Oriente no necesitan ni quieren protección de ningún país occidental. “Nosotros en Siria no queremos que nadie nos proteja. Nos bastamos para protegernos a nosotros mismos”, afirmó.
Por su parte, el sacerdote ortodoxo Bishara Qara confirmó que la ciudad sufrió el terrorismo, pero que la civilización siria no morirá porque todos los sirios la mantienen y defenderán su tierra hasta el último grano de arena que hay en ella.
Las ceremonias cristianas y de varios grupos musulmanes estuvieron prohibidas en Darayya durante los cinco años de ocupación de los terroristas, que saquearon las iglesias y las incendiaron. Aunque los cristianos recibieron apoyo y solidaridad de sus conciudadanos musulmanes pocos se atrevieron a expresarse en contra de tales acciones de los terroristas por temor a ser asesinados.
Hoy, tras la liberación, las campañas de la Catedral Ortodoxa de Darayya han vuelto a tañer de nuevo y los cristianos de la ciudad sienten que pueden dejar atrás el miedo y ocupar su lugar en el futuro de la ciudad y de toda Siria.
Source: Agencias