¿Es este el preludio de una reanudación de las hostilidades en el frente libanés? ¿Tomará represalias Hezbolá, y cómo?
Estas dos preguntas han dominado la escena política en Beirut desde que el enemigo sionista asesinó al comandante militar de Hezbolá, Haitham Ali Tabatabai, en un ataque aéreo en pleno corazón de los suburbios del sur el domingo 23 de noviembre.
Si bien esta escalada no fue inesperada, dada la preparación política establecida por los medios de comunicación israelíes y los funcionarios sionistas, así como por los emisarios internacionales y árabes que han visitado recientemente el Líbano, ha adquirido una importancia considerable. Algunos la han interpretado como “el preludio de la guerra con la que nos han amenazado”.
El lunes 24 de noviembre, Hezbolá celebró una procesión fúnebre por su comandante en jefe, Haitham Ali Tabatabai, y cuatro de sus camaradas: Qassem Berjaoui, Mostafa Berro, Rifaat Hussein e Ibrahim Hussein.
A la ceremonia asistió una gran multitud de simpatizantes de la resistencia, que corearon consignas hostiles a “Israel” y EEUU, como “¡Muerte a EEUU” y “¡Muerte a Israel!”.
El jefe del Consejo Ejecutivo de Hezbolá, Sheij Ali Daamush, pronunció un discurso en el que declaró: “El comandante superior Tabatabai fue un líder valiente, dedicado a la resistencia. Pasó más de 35 años en el frente, sin abandonarlo jamás. Fue uno de los comandantes más destacados que lideraron con valentía y habilidad la Batalla de Uli al-Bas (la última guerra israelí contra el Líbano)”.
Sheij Daamush afirmó que “el asesinato de este gran comandante tenía como objetivo socavar la voluntad y la determinación de la resistencia, así como intimidarla y debilitarla, obligándola a someterse. Sin embargo, este objetivo nunca se logrará, pues somos un grupo que cree en Dios y en el Día del Juicio Final, que cree en su causa y su camino, y que está dispuesto a sacrificar lo que más le es valioso”.
Sheij Daamush enfatizó además que “el martirio del comandante Tabatabai no obstaculizará la resistencia, no la disuadirá de completar la obra iniciada por este gran mártir ni la empujará a la capitulación”.
“Los sionistas están preocupados por una posible respuesta de Hezbolá, y deberían seguir preocupados, pues han cometido graves crímenes contra la resistencia y el Líbano”. “Creen que este asesinato perturbará la estructura y el liderazgo de la resistencia, pero han olvidado que tenemos líderes valientes capaces de llenar cualquier vacío”, reiteró.
Sheij Daamush señaló: “La raíz del problema en el Líbano actual reside en la persistente agresión sionista, no en el ejército ni en la resistencia. Es deber del Estado contrarrestar esta agresión por todos los medios y proteger a sus ciudadanos, su soberanía y su independencia. El gobierno debe desarrollar planes claros a tal efecto y rechazar las presiones que buscan obligar al Líbano a someterse a los dictados estadounidenses y a las condiciones israelíes, porque esto equivale a una capitulación, no a una solución ni a un acuerdo. Todas las concesiones hechas hasta ahora por el gobierno, desde el monopolio de las armas hasta la aceptación de la propuesta estadounidense, incluyendo el despliegue del ejército e incluso la disposición a negociar, han sido en vano y no han dado resultados”.
Añadió: “El enemigo está actualmente violando todo el Líbano y ejerciendo presión desde todos los frentes para obligarnos a capitular, pero no lo haremos. Eso es absolutamente imposible, a pesar de las amenazas y la intimidación. Por lo tanto, todas las amenazas, todos los asedios y toda la presión actual serán en vano”.
Sheij Daamush concluyó: “Si los habitantes del Líbano y del mundo entero se preocupan por la soberanía, la verdadera independencia y la estabilidad de este país, y quieren evitar que la situación empeore, deben presionar al enemigo israelí y obligarlo a cesar sus agresiones y violaciones contra el Líbano… No importa a quién maten y destruyan, no nos interesará ninguna propuesta ni iniciativa mientras continúen las agresiones y las violaciones y el enemigo israelí no respete los términos del acuerdo de alto el fuego”.
Source: Al Manar



