El 21 de marzo, las Fuerzas Armadas rusas anunciaron que realizaron un ataque con misiles de crucero de alta precisión lanzados desde el aire contra el centro de entrenamiento para mercenarios extranjeros y formaciones nacionalistas ucranianas en Novaya Lyubomirka, en la región de Rivne. Se informó que más de 80 mercenarios y nacionalistas fueron eliminados.
Además, un ataque con misiles de crucero destruyó el depósito de municiones y el cuartel general de una brigada mecanizada de las Fuerzas Armadas de Ucrania en la zona del pueblo de Selets.
El 20 de marzo, el Ministerio de Defensa de Rusia anunció que misiles de alta precisión lanzados desde el aire impactaron en el centro de entrenamiento de las fuerzas de operaciones especiales de las Fuerzas Armadas de Ucrania, donde se encontraban mercenarios extranjeros. El ataque contra la base, situada cerca del asentamiento de Ovruch, región de Zhytomyr, eliminó a más de 100 miembros de las fuerzas pro-Kiev, incluidos mercenarios extranjeros.
Según el Ministerio de Defensa de Rusia, en la tarde del 19 de marzo y en la mañana del 20 de marzo se llevaron a cabo nuevos ataques contra instalaciones de infraestructura militar en Ucrania.
Desde las aguas del Mar Negro, los misiles de crucero con base en el mar “Kalibr” golpearon la planta de reparación de Nezhin y destruyeron los talleres para la reparación de vehículos blindados ucranianos dañados en las hostilidades.
Otro ataque que involucró misiles “Kalibr” (desde el Mar Caspio) y misiles hipersónicos “Kinyal” lanzados desde aviones destruyeron una gran base para almacenar combustible y lubricantes de las fuerzas armadas ucranianas cerca del pueblo de Konstantinovka, región de Mykolaiv. Esta base se utilizaba para el suministro de combustible para vehículos blindados ucranianos en las áreas de combate del sur de Ucrania.
El día anterior, el 19 de marzo, el ejército ruso había informado por primera vez del disparo de misiles aerobalísticos hipersónicos “Kinyal”, que destruyeron un “gran almacén subterráneo de misiles y municiones de la aviación ucraniana”.
Los misiles Kinyal (“daga” en ruso) ya se habían utilizado muchas veces en ejercicios desde la primera prueba exitosa en 2018.
Una de las “armas invencibles” de Rusia, dice Putin
Este tipo de misil desafía a los sistemas de defensa antiaérea, según Moscú, debido a su velocidad -hasta Mach 10, o sea 12.000 km/h- y su maniobrabilidad, que lo hacen difícil o incluso imposible de interceptar.
Estos misiles Kinyal y los misiles de crucero Zircon, disparados desde barcos de superficie y submarinos, pertenecen a una familia de nuevas armas desarrolladas en Rusia que Vladimir Putin llama “invencibles”.
Probados con éxito en 2018, los Kinyal alcanzaron todos sus objetivos en pruebas a distancias de hasta 1.000-2.000 km, según el Ministerio de Defensa de Rusia.
Pero este rango se multiplica porque pueden ser lanzados por aviones, en particular los MiG-31.
Rusia es el primer país del mundo en haber desarrollado armas hipersónicas.
Source: Diversas