El gigante energético Saudi Aramco anunció el domingo 20 de marzo un beneficio neto de 41.000 millones de euros en 2020, un 44,4% menos que el año anterior, debido a la caída de los precios del crudo y la reducción de la demanda por la pandemia mundial.
Además, este gigante petrolero ha sido blanco de varios ataques con drones y misiles por parte de las fuerzas yemeníes de Sanaa en respuesta a la agresión militar saudí y el bloqueo contra Yemen.
“Aramco logró un beneficio neto de 49.000 millones de dólares (41.000 millones de euros) en 2020”, frente a los 88.200 millones de dólares (73.800 millones de euros) del año anterior”, dijo la empresa saudí en un comunicado de prensa, citado por AFP.
Arabia Saudí, el mayor exportador mundial de petróleo crudo, se vio afectada el año pasado por los bajos precios y los fuertes recortes en la producción.
“Los ingresos se vieron afectados por los menores precios del crudo y los volúmenes vendidos, así como por la reducción de los márgenes de refinación y los productos químicos”, dijo la empresa.
En las últimas semanas, los precios del crudo han subido por encima de los 60 dólares el barril debido a los ataques yemeníes.
Sin embargo, los analistas creen que el gigante saudí se está preparando para una posible nueva ola de coronavirus que podría poner en peligro la tímida recuperación económica mundial y erosionar aún más la demanda mundial de petróleo crudo.
Aramco, considerada la principal fuente de ingresos de Arabia Saudí, ha registrado caídas consecutivas en las ganancias desde que la compañía comenzó a informar de resultados en 2019.
Esto ha ejercido presión sobre las finanzas públicas mientras Riad promueve ambiciosos proyectos multimillonarios para diversificar la economía dependiente del petróleo. La compañía ha recortado el gasto de capital y cientos de puestos de trabajo en su intento de reducir costos, informó Bloomberg News en junio.
Source: Agencias