Los círculos políticos argelinos están indignados por las recientes acciones del embajador francés, François Gouyette, y consideran que algunas de estas acciones se parecen mucho a una verdadera sedición en movimiento.
Según el sitio web Russia Today, el embajador francés se reunió recientemente con varias figuras políticas y mediáticas en Argelia y estas medidas se producen después de que el presidente francés hablara del inicio de una fase de transición en el país norteafricano, una declaración que se consideró por funcionarios argelinos como una flagrante injerencia en los asuntos internos de su país.
El embajador francés en Argelia ocupó anteriormente el mismo cargo de 2008 a 2012 y durante la revolución de 2011 en Libia jugó un papel activo en la ofensiva militar de la OTAN contra el país.
Fuentes argelinas aseguran que el embajador francés está tratando de aprovechar la ausencia del presidente argelino, Abdelmayid Tebún, quien está alejado de la política por enfermedad. Las recientes acciones de Gouyette podrían llevar a Argelia a adoptar una postura dura contra Francia y empujarla a revisar sus relaciones con París, que han sido muy tensas durante el último mes.
El ministro argelino de Comunicación y portavoz del gobierno, Amar Belhimer, criticó la semana pasada a Francia por su papel en el proyecto de ley del Parlamento Europeo sobre la libertad y los derechos humanos en Argelia, calificando la posición francesa de “estúpida y vergonzos”. Belhimer destacó que todo indicaba que Argelia estaba pagando un alto costo por haber defendido causas justas con África y Oriente Medio y por haber criticado en particular la normalización árabe con el régimen sionista.
Source: Russia Today