Desde marzo de 2020, un ataque simultáneo con drones tomó como objetivo el cuartel general de las fuerzas de la Resistencia en Saraqib, en Idleb, una acción que les valió a las fuerzas turcas un bombardeo del Ejército sirio y la Resistencia, que liberaron a continuación la mencionada localidad estratégica en un fuerte golpe a los planes del presidente turco, Recep Tayyip Erdogan.
El dron turco Bayraktar participó en el conflicto de Nagorno-Karabak. Casi un mes después del final de este conflicto Erdogan envió de nuevo sus drones Bayraktar a atacar las posiciones del Ejército sirio y sus aliados de la Resistencia en Raqqa.
Según el sitio web libanés Al Masdar News, el Ejército sirio derribó el martes a varios de estos drones Bayraktar que intentaron atacar las posiciones sirias en las afueras del norte de la gobernación de Raqqa. El lugar del enfrentamiento fue la ciudad de Ain al Issa. En Raqqa, el Ejército sirio protege, entre otros, a los kurdos de Siria que, según Al Masdar, habían estado luchando durante 72 horas contra las fuerzas turcas y sus mercenarios cuando tuvo lugar el ataque de los drones Bayraktar.
Al Masdar News no dice nada sobre el sistema que derribó estos drones, pero lo más probable es que se tratara del sistema iraní Khordad-3, desplegado en las fronteras de Siria con el sur del Líbano, pero que visiblemente está comenzando a aparecer un poco más al norte, en Raqqa.
El Khordad-3 es uno de los sistemas de defensa antiaérea de fabricación nacional de Irán que puede operar en un campo de guerra electrónica y tiene suficiente capacidad para destruir misiles de crucero, drones y aviones que actúan a distancia. De hecho, también está equipado con un sistema electro-óptico, que ha reforzado su capacidad no solo para frustrar ataques electrónicos sino también para interceptar mejor los aparatos sigilosos del enemigo.
En Nagorno-Karabaj, con la ayuda de aviones espías de EEUU y la OTAN el dron Bayraktar pudo destruir sistemas rusos Pantsir, entre otros. “Los drones se dedican a crear objetivos falsos en el radar de la defensa antiaérea y cuando el sistema de defensa comienza a disparar, los cazas, equipados con armas de precisión a distancia, lo localizan y destruyen. Sin embargo, para enfrentarse a esta táctica, el sistema Khordad-3 utiliza simultáneamente dos sistemas, un radar y un dispositivo electro-óptico. “En principio, es muy difícil, si no imposible, interrumpir los sistemas electroópticos, de ahí la virtud de Khordad-3”, señaló un experto al reportero de Press TV, al comentar sobre la operación de drones turcos en Raqqa.
El martes por la mañana, una gran cantidad de vehículos entraron en el área del puesto de observación turco, que el Ejército sirio mantenía asediado en el área de Rashidin 5, en Alepo. Y luego, el ejército turco comenzó a cargar los vehículos con equipos en lo que parecen ser los preparativos para una retirada completa del área estratégica de Rashidin, la quinta de Turquía en menos de un mes. Fuentes locales señalaron que la cantidad de vehículos que arribaron allí el martes superó los 30, la mayoría de ellos camiones utilizados para transportar materiales. Aunque el ejército turco no ha hablado de estas retiradas, ya ha comenzado a desmantelar sus puestos de observación en varias áreas bajo el control del Ejército sirio.
Source: Press TV