La ONG Amnistía Internacional criticó el jueves a Gran Bretaña por continuar vendiendo armas a Arabia Saudí, acusando a Londres de “ignorar el derecho internacional”.
En una declaración, la organización calificó la posición de la ministra de Comercio Internacional británica, Liz Truss, con respecto a los ataques aéreos de las fuerzas saudíes contra Yemen como una “declaración hipócrita”. Truss consideró los bombardeos saudíes contra diferentes regiones de Yemen como “actos individuales”.
La declaración dijo que Gran Bretaña vendió armas por valor de 5.000 millones de libras a Arabia Saudí durante la guerra en Yemen, y agregó que su reciente decisión de continuar vendiendo armas a Riad es “un intento de ignorar el derecho internacional”.
En este contexto, Amnistía recordó que el Tribunal de Apelación británico dictaminó el año pasado que “la concesión por el gobierno de licencias para exportar equipos militares a Arabia Saudita es ilegal”.
La directora de Amnistía en Londres, Kate Allen, ha llamado a Gran Bretaña para “revisar su sistema de control de armas”.
“Arabia Saudí ha estado llevando a cabo ataques aéreos contra Yemen durante 5 años, que resultaron en la muerte de civiles en escuelas, hospitales, funerales y mercados”, reiteró Allen, quien dijo que estaba sorprendida por el declaración de la ministra Truss.
La coalición liderada por Arabia Saudí ha librado una guerra mortal desde marzo de 2015 e impuso un bloqueo contra Yemen que cobró la vida de decenas de miles de civiles y causó la peor crisis humanitaria del mundo, según la ONU.
Más de 85,000 niños pueden haber muerto como resultado de la escasez causada por el bloqueo y la desnutrición, dijo la ONG Save the Children.
Mientras tanto, las Naciones Unidas esperan que unas 230.000 personas mueran en Yemen debido a la guerra, la desnutrición y enfermedades como el cólera.
Source: Agencias