Egipto apoya al general Jalifa Haftar que está luchando contra el gobierno de el Gobierno del Acuerdo Nacional de Libia (GAN) liderado por Fayez al Sarray. Turquía, por su parte, al GAN, y sabe que la intervención directa sería costosa debido a la necesidad de transportar a sus tropas en barco o avión. Además, la participación turca en Siria y Libia es impopular en Turquía, por lo que enviar soldados turcos a Libia sería políticamente difícil. Según los informes, Turquía ha enviado miles de mercenarios sirios y extranjeros que luchan contra el Ejército sirio en el norte de Siria a Libia. Sin embargo, un paso en falso podría precipitar una confrontación directa.
Haftar se acercó a Trípoli el invierno pasado, pero sufrió varios reveses y tuvo que retirarse hacia Cirenaica, en el este de Libia. Por el momento, hay una línea situada al oeste de Sirte, en el centro del país, que las tropas de la GAN no cruzan a pesar de sus declaraciones previas. El presidente de Egipto, Abdel Fattah al Sisi, advirtió al GAN que no ataque Sirte o Jufra, una ciudad cercana.
El experto en temas militares egipcio Mohammed Al Kinani cree que la decisión de Egipto de establecer tal línea roja ha puesto en un aprieto a la Turquía del presidente Recep Tayyip Erdogan, que se arriesga a sufrir “grandes pérdidas”.
El experto egipcio cree que el Ejército turco tiene que recorrer largas distancias para asegurar el suministro y apoyo logístico a sus fuerzas navales y aéreas en Libia, con un costo financiero colosal.
“Pero las fuerzas armadas egipcias lucharían cerca de sus costas, sus tierras y su espacio aéreo, y en un entorno familiar que representa una profundidad estratégica directa para Egipto (el este y el centro de Libia), lo que les permite formar líneas de defensa. Egipto disfruta de una posición dominante y mucho margen de maniobra ya que sus fuerzas están listas para emboscar a los turcos e infligirles grandes pérdidas”, dijo.
Según él, el Ejército egipcio ciertamente tendrá la capacidad de compensar las pérdidas y asegurar las líneas de suministro y apoyo logístico, que cubren distancias mucho más cortas que en el lado turco, dado que Egipto comparte una frontera con Libia. Esto dificulta aún más la tarea de la marina y la aviación turcas, dada la urgente necesidad ue tienen de proteger el espacio aéreo turco y las costas que se extienden hasta el Mediterráneo, el Egeo, el Mar de Mármara y el Mar Negro. Turquía tendría que usar las líneas de suministro aéreo y terrestre, que discurren desde Turquía a Libia en una distancia de entre 1.500 y 2.000 km, pasando cerca del territorio de Egipto, cuya fuerza aérea y marina podrían atacar a los barcos y aviones turcos.
“Egipto no definió su línea roja de la nada, sino más bien sobre la base de la planificación y una posición estratégica estudiada a diferentes niveles y con plena legitimidad internacional y regional”, concluyó Kinani.
Source: Press TV