El representante permanente de Siria ante Naciones Unidas, Bashar Yaafari, condenó el viernes la politización del tema humanitario y el doble rasero empleado por Occidente y sus aliados para utilizarlo como un arma para atacar a Damasco.
En una sesión de la Asamblea General, que adoptó una resolución sobre la situación en el país levantino, el diplomático consideró la iniciativa contraria a la Carta de la ONU y portadora de intenciones ocultas, en un contexto marcado por el objetivo de algunas potencias de derrocar al gobierno sirio.
Yaafari rechazó que en uno de sus numerales, el texto se refiera a un gobierno legítimo con el término de ‘régimen’ y que la Asamblea se pronuncie sobre el conflicto mientras el Consejo de Seguridad lo analiza, cuestiones que, insistió, contravienen la Carta de la Organización.
De acuerdo con el embajador, Canadá, el país presentador del proyecto aprobado aquí, y otros con marcadas posturas anti-sirias, como Estados Unidos, Francia, Reino Unido, Arabia Saudita, Qatar y Turquía, muestran un supuesto interés en detener el sufrimiento del pueblo sirio y a la vez respaldan a los extremistas que siembran en el mismo destrucción y muerte.
La iniciativa adoptada en la Asamblea General por 122 votos a favor, 13 en contra y 36 abstenciones exige el cese inmediato de los ataques contra civiles, un alto el fuego, el acceso humanitario a las víctimas de la crisis, la reanudación de las negociaciones para la salida política y la rendición de cuentas por los responsables de crímenes.
Vemos que los mismos que aplican sanciones económicas unilaterales asfixiantes para la población y la bombardean a nombre de una coalición anti-terrorista, hablan ahora de preocupaciones humanitarias, denunció.
Para Yaafari, no menos manipulador es el hecho de que la resolución comience comprometiéndose con la soberanía, la independencia, la unidad y la integridad territorial de Siria, ‘cuando en la práctica vemos actuaciones bien alejadas de eso’.
En ese sentido, recordó que la coalición creada para bombardear al Estado Islámico (EI) no coordina sus acciones con Damasco y ataca deliberadamente hospitales, escuelas y poblados, donde pierden la vida cientos de civiles.
Incluso, Estados Unidos masacró a integrantes del ejército sirio desplegados en Deir ez-Zor para combatir a los terroristas, dijo en alusión al bombardeo de sus posiciones en septiembre pasado por aviones del Pentágono, con saldo de decenas de uniformados muertos.
Según Yaafari, su país debería recibir el reconocimiento de Canadá y otros países por sus progresos en la lucha contra el EI y el terrorismo en general.
También deberían escuchar las trágicas historias de miles de personas salvadas por nuestro ejército de la violencia y los crímenes del Frente al Nusra y otros grupos que asesinan, torturan, violan a mujeres y obligan a niños a combatir, añadió en la Asamblea General de la ONU.
El diplomático insistió además en la total falta de imparcialidad del proyecto recién aprobado y en la de varios de sus promotores en Occidente y el Medio Oriente, que suministran dinero, armas y respaldo directo a los responsables de enlutar a diario al pueblo sirio.
Source: PL
