Según el sitio web libanés El Nashra, Siria y Rusia se vengaron de EEUU e Israel al destruir un F-16 israelí el 10 de febrero.
El editorialista Mayid al Hah trató en un artículo en El Nashra de la destrucción del F-16 israelí por la Defensa Aérea siria: “Moscú y Damasco derribaron el avión para vengarse de Washington y Tel Aviv”, indicó.
“Después del derribo de un Sujoi Su-25 en el sur de la provincia siria de Idleb por un misil antiaéreo de un grupo terrorista que lucha contra el gobierno de Damasco, y después de la muerte de civiles rusos en Deir Ezzor en los ataques la llamada coalición internacional anti-Daesh liderada por los EEUU, Moscú y Damasco querían vengarse al mismo tiempo contra EEUU e Israel”, se lee en este artículo. De este modo, Siria no solo derribó el avión israelí, sino que también interceptó sus misiles para sorpresa de los observadores internacionales.”
“Llegamos a la conclusión de que el sistema de defensa antimisil israelí, Iron Dome, es ineficaz para interceptar misiles sirios que podrían apuntar al centro de Tel Aviv. Como prueba, después de la destrucción del F-16 Israel, más de un millón de israelíes asustados se precipitaron a los refugios, el Aeropuerto Ben Gurion se cerró y sonaron las alarmas de las sirenas en los asentamientos judíos, fronterizos con Líbano y Siria. También presenciamos la huida colectivo de miles de colonos israelíes.
Damasco también quiso hacer comprender a Washington y a Tel Aviv que si EEUU amenazan al Ejército sirio, Israel no estará al abrigo de los ataques sirios, una realidad revelada por el periódico norteamericano The Washington Post: “El Ejército sirio opondrá una respuesta firme a todo ataque norteamericano contra Siria y lanzará misiles Scud contra Israel”.
Source: Diversas