La Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU (OCHA) advirtió el lunes sobre un incremento del empleo de munición real por fuerzas de seguridad israelíes contra civiles palestinos.
En un nuevo reporte acerca de la Protección de Civiles, la agencia especializada abordó casos de muertos y heridos en Cisjordania y la Franja de Gaza, en julio y agosto de este año, como resultado de los disparos con proyectiles de combate por efectivos de Tel Aviv.
Según la OCHA, nueve palestinos perdieron la vida en la Ribera Occidental, la mayoría durante choques relacionados con redadas israelíes, aunque en tres de los casos los ocupantes alegaron que abrieron fuego en respuesta a ataques.
Entre las personas asesinadas estuvo una mujer embarazada de 27 años, abatida por policías fronterizos en Hebrón, quienes esgrimieron que trataba de apuñalarlos, precisó.
La Oficina también señaló en su informe que los heridos de bala en Cisjordania aumentaron de 30 a 66 en julio y agosto, en comparación con los meses previos.
De acuerdo con la OCHA, los militares israelíes tienen la responsabilidad de proteger a la población y a sí mismos, pero deben reducir la utilización de las armas de fuego al mínimo necesario, porque pueden cumplir esos propósitos mediante otros medios.
Urge que actúen con calma y proporcionalidad, subrayó.
En sus informes semanales y mensuales, la agencia de la ONU encargada de los asuntos humanitarios incluye casos de uso excesivo de la fuerza por parte de Israel, entre ellos el empleo de proyectiles de combate contra manifestantes y personas que lanzan piedras o se aproximan a las cercas y barreras impuestas en los territorios ocupados.
Source: PL