El movimiento de resistencia palestino Hamas reiteró su oposición a la imposición de “cualquier nueva exigencia o condición” por parte del régimen israelí para la implementación de un alto el fuego en la Franja de Gaza, que ha sido objeto de una guerra genocida por parte del régimen durante los últimos 11 meses.
La delegación del movimiento, encabezada por el subdirector del Buró Político Jalil al-Hayya, hizo estas declaraciones al primer ministro qatarí, Sheij Mohammed bin Abdulrahman, y al ministro general de inteligencia egipcio, Abbas Kamel, en la capital qatarí, Doha, el miércoles.
Doha y El Cairo han estado mediando en negociaciones destinadas a la posible conclusión de un acuerdo de tregua que podría poner fin a la guerra que el régimen ha llevado a cabo entre octubre y el presente tras una operación de represalia organizada por los grupos de resistencia de Gaza. Al menos 41.084 palestinos, la mayoría de ellos mujeres, niños y adolescentes, han muerto y más de 95.000 han resultado heridos como resultado de la brutal embestida militar.
El equipo de Hamas repitió las afirmaciones del grupo de que cualquier acuerdo tenía que incluir “la retirada del ejército de ocupación de todas las áreas de la Franja de Gaza”.
Dicha retirada debe tener lugar “de una manera que sirva a los intereses de nuestro pueblo, permita un acuerdo de intercambio de prisioneros/cautivos, proporcione ayuda a nuestro pueblo y facilite el regreso de las personas desplazadas y (el inicio del) proceso de reconstrucción de Gaza”, agregó.
El movimiento también rechazó “cualquier proyecto relacionado con la fase posterior a la agresión en la Franja de Gaza”, subrayando que “la gestión de la franja es un asunto interno palestino que debe acordarse con una visión palestina unificada”.
En julio, Hamas aceptó un acuerdo de tregua que incluía las condiciones anteriores, que había sido presentado por la administración del presidente de EEUU, Joe Biden.
El régimen israelí, sin embargo, rechazó la propuesta antes de presentar “nuevas condiciones”, incluida la de mantener sus fuerzas dentro de Gaza a lo largo de la franja costera fronteriza con Egipto.
El primer ministro israelí, Benyamín Netanyahu, ha hecho oídos sordos a las enérgicas demandas internacionales que exigen el fin de la guerra.
Source: Diversas