Más de 120 civiles palestinos murieron en la ciudad de Rafah, sur de la Franja de Gaza, desde el inicio de la ofensiva israelí contra la localidad a principios de esta semana, denunció este sábado una fuente local.
El Comité Central de Emergencia en Rafah detalló en un comunicado que en las últimas horas los bombardeos de la aviación y la artillería afectaron todas las áreas de esa gobernación.
Ante esa situación, alertó sobre el éxodo masivo de refugiados a otras zonas de la Franja y criticó el cierre por parte de “Israel” del paso fronterizo de Rafah, que limita con Egipto.
Esa decisión afecta a las vidas de la población gazatí, que depende del urgente alivio diario de la ayuda humanitaria que proviene del exterior, afirmó la declaración.
El comité criticó la falta de acciones concretas de la comunidad internacional para detener las acciones del Gobierno de Benyamin Netanyahu.
“Los bombardeos, matanzas y operaciones de destrucción en curso en Rafah son una clara indicación de una intención premeditada y de una firme determinación israelí de continuar con el crimen y el castigo colectivo”, subrayó.
El Ejército cortó ayer en dos la ciudad como parte de su ofensiva contra Hamas, en medio de duras críticas internacionales por la situación de más de un millón de refugiados palestinos.
Según la prensa de ese país, tanques de guerra avanzaron por la carretera Salah el-Din, y separaron la zona oriental y occidental de esa urbe.
Este viernes la ONU anunció que unos 110.000 palestinos huyeron en los últimos días de Rafah como resultado de las operaciones militares de ese país.
“A medida que los bombardeos de las fuerzas israelíes se intensifican en Rafah el desplazamiento forzado continúa”, alertó en su cuenta en la red social X el Organismo de Obras Públicas y Socorro de las Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Medio (UNRWA).
En la misma red social, la vocera de la Unrwa en Gaza, Louise Wateridge, también criticó el desplazamiento de los palestinos.
Las tropas israelíes ya ocuparon esta semana el cruce fronterizo de igual nombre, que durante los últimos siete meses representó la única puerta de entrada a Gaza de alimentos, medicinas y combustible.
“La situación es grave, si los cruces de Kerem Shalom y Rafah no se reabren para enviar combustible y suministros humanitarios, las consecuencias se sentirán casi de inmediato”, advirtió la directora ejecutiva del Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), Catherine Russell.
Netanyahu afirmó en repetidas ocasiones que sus tropas entraran en Rafah con o sin acuerdo de cese el fuego con Hamas, pese a la ola de críticas internacionales a una acción de fuerza en medio de una zona densamente poblada de civiles, la mayoría mujeres y niños.
En respuesta, Hamas advirtió hace días a “Israel” que su entrada a Rafah “no será un paseo”.
Source: Prensa Latina