El representante especial de la Unión Europea (UE) para el Proceso de Paz de Oriente Medio, Sven Koopmans, condenó este viernes la ocupación israelí de Cisjordania y Jerusalén Este, al tiempo que criticó varias políticas de esa nación.
“A veces escucho que la gente niega (que) no es una ocupación. Es una ocupación. Todo el mundo lo ve así. El hecho de que se prolongue es muy problemático”, afirmó en una entrevista con el diario The Jerusalem Post.
El funcionario alertó que las demoliciones por parte de ese país de estructuras palestinas en la Ribera Occidental son inaceptables y alimentan las tensiones con la UE.
Las demoliciones son un factor “muy negativo y déjame decirte que esto es algo muy difícil de explicar a los europeos”, en especial por aquellas obras que financió el bloque, subrayó.
Solo en 2022 “Israel” demolió 101 estructuras pagadas por el llamado viejo continente, que supuso una pérdida de 337.000 euros.
“Estamos muy molestos porque con mucha frecuencia los proyectos humanitarios que pagamos son derribados”, recalcó.
Resulta incomprensible para nosotros que “Israel” niegue a los palestinos construir en el Área C, apuntó.
El Área C constituye el 61 por ciento de Cisjordania y está bajo total control del ejército de la vecina nación. Allí se levantan más de un centenar de asentamientos en los que viven medio millón de colonos judíos.
Koopmans afirmó que “Israel” tiene responsabilidad como potencia ocupante ante la población palestina.
Asimismo, alertó, tiene la obligación de protegerlos de la violencia de los extremistas judíos, incluidos los colonos, que en las últimas semanas intensificaron los ataques con aldeas cisjordanas.
Visité a un joven padre que tiene niños pequeños, me dijo “dos veces a la semana vienen los colonos y les tiran piedras a mis hijos”, señaló el diplomático.
“Estoy aquí porque queremos ayudar y queremos hacer una contribución para poner fin a la ocupación, es en interés de todos”, expresó.
Source: Prensa Latina