El Washington Post consideró que la participación del presidente sirio Bashar al-Assad en la Cumbre Árabe en Yeddah, Arabia Saudí recientemente, y el regreso de Siria a la Liga Árabe, promovido por los saudíes, son parte de un intento de aliviar las fricciones en Oriente Medio después de años de polarización geopolítica, guerras devastadoras y malestar social.
Hizo hincapié en que la normalización árabe con Damasco avanza a toda marcha y que Washington no puede hacer nada para evitar que suceda.
A su vez, el periódico británico Financial Times destacó la posición estadounidense y británica sobre la invitación de los Emiratos Árabes Unidos al presidente Assad para asistir a la Conferencia Mundial del Clima “COP28”, que afirma que es “una cuestión del país anfitrión”.
En cuanto a las Naciones Unidas, expresó su posición diciendo, según el periódico, que “EAU, como país anfitrión de la cumbre, es responsable de invitar a los jefes de estado y de gobierno”.
Y el “Washington Post” indicó en un reportaje que fue transmitido ayer por el canal “Al-Mayadeen”, que el príncipe heredero del Reino de Arabia Saudí, Muhammad bin Salman bin Abdulaziz Al Saud, expresó su esperanza de que el regreso de Siria a la Liga Árabe ponga fin a su crisis.
El periódico citó a un ex funcionario del Pentágono que dirige los programas de Oriente Medio en el Consejo Atlántico diciendo que “la normalización con Siria avanza a toda marcha… y que los países árabes juzgan con precisión la posición de EEUU sobre la normalización… que es que no quiere apoyarla, pero no hará nada para evitar que suceda”.
El 15 de este mes, el presidente al-Assad recibió una invitación del presidente de los Emiratos Árabes Unidos, Mohammed bin Zayed Al Nahyan, para asistir a la Conferencia Climática COP28, que se llevará a cabo en Dubái del 30 de noviembre al 12 de diciembre.
Source: Diversas