Decenas de miles de personas salieron a las calles de Austria el sábado para protestar contra el aumento de los precios de la energía, el aumento de la inflación y la incapacidad del gobierno para hacer frente a la crisis del costo de vida que empeora rápidamente.
Según los organizadores, más de 30.000 personas participaron en las manifestaciones en todo el país, incluidas 20.000 solo en la capital, Viena, coreando consignas y exigiendo precios más bajos, salarios más altos y un límite en las facturas de electricidad y gas.
Las protestas fueron convocadas por la Federación Sindical de Austria (OGB) y contaron con el respaldo de representantes sindicales y activistas por los derechos de las mujeres.
La tasa de inflación del país centroeuropeo para agosto se situó en el 9,3 por ciento mientras que la cesta de consumo (coste del consumo de los hogares y servicios esenciales) subió un 16 por ciento con respecto al año pasado, según informa Zeitung der Arbeit (ZdA).
El aumento de los precios de la energía junto con la inflación desbocada han puesto el sustento de las personas bajo fuertes limitaciones después de que los países europeos rompieran sus lazos energéticos con Rusia, el principal proveedor de gas natural de Europa, por el conflicto de Ucrania, lo que provocó una grave crisis económica en el continente.
En Francia, y convocada por el presidente del partido de los Patriotas, Florian Philippot, se produjo una manifestación el 17 de septiembre en París contra la UE, la OTAN, el presidente Emmanuel Macron y la política de racionamiento adoptada por este último.
Bajo una pancarta de “Resistencia”, se reunieron decenas de miles de personas, según el ex eurodiputado, para pedir al presidente francés, Emmanuel Macron, y a la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, “que dimitan”, pero también para pedir la salida de la OTAN, la negativa a los racionamientos y sanciones y la defensa de “la libertad, la paz y la soberanía” en palabras de Florian Philippot.
Cabe señalar que aparentemente los principales medios de comunicación franceses no han informado sobre la manifestación, y la prefectura no ha emitido un comunicado de prensa sobre el evento.
El 3 de septiembre, 70.000 personas se manifestaron en Praga para protestar por la excesiva atención del gobierno checo a Ucrania y expresar su oposición a la Unión Europea y la alianza militar occidental de la OTAN.
Los manifestantes expresaron su ira por la creciente inflación provocada por el aumento de los precios de la energía y la entrada de un gran número de expatriados ucranianos desde febrero, cuando Rusia inició su operación militar en Ucrania.
Source: Diversas
