Rusia y Arabia Saudí están impulsando su cooperación en el sector petrolero, pese a que uno de los objetivos del presidente estadounidense, Joe Biden, quien visitó Arabia Saudí la semana pasada, como parte de un viaje de tres días a Oriente Medio, era convencer a Riad para aumentar la producción de crudo y hacer bajar los precios del petróleo, que están exacerbando las presiones inflacionarias, y compensar así la disminución del petróleo ruso en el mercado. Biden y su administración también intentaron aislar a Rusia y privarla de grandes ingresos por sus exportaciones de energía, pero fue en vano.
Durante un contacto telefónico el jueves por la noche, el presidente ruso y el príncipe heredero de Arabia Saudita revisaron conjuntamente la situación de la producción mundial de petróleo y el equilibrio del mercado energético.
El Kremlin dijo en un comunicado que Putin enfatizó la importancia de la cooperación continua en el marco de la OPEP+ durante esta conversación telefónica.
“Se discutió en detalle la situación que prevalece en el mercado mundial del petróleo. Se ha subrayado la importancia de una mayor cooperación entre las dos partes en el marco de la OPEP+”, dice el comunicado.
“Ambas partes expresaron su satisfacción de que los países miembros (de la OPEP+) hayan cumplido consistentemente con sus compromisos de mantener el equilibrio y la estabilidad necesarios en el mercado energético global”, dijo el comunicado.
El texto también agrega que Putin y Bin Salman también discutieron la expansión de las relaciones comerciales y económicas e intercambiaron puntos de vista sobre la situación actual en Siria.
Esta conversación telefónica se realizó 6 días después de que el presidente de EEUU, Joe Biden, asistiera a una cumbre en Yeddah, Arabia Saudí.
Muchos medios de todo el mundo creen que la gira de Biden por la Palestina ocupada y Arabia Saudí no tuvo éxito.
AFP fue aún más lejos y calificó la cumbre de Yeddah como un “fracaso rotundo”.
Source: Agencias
