El Tribunal Supremo Administrativo de Egipto confirmó el lunes la cancelación de la entrega de dos islas egipcias, Tirán y Sanafir, situadas en el Mar Rojo a Arabia Saudí.
El tribunal dictaminó que las islas eran parte del territorio soberano egipcio. Este fallo se produjo tras las oleadas de protestas populares en Egipto en contra de dicha entrega. El presidente Abdul Fatah al Sissi anunció planes para la entrega a Arabia Saudí de las dos islas del Mar Rojo durante una visita a El Cairo del rey Salman en abril de 2016.
Tras las protestas generalizadas y la oposición de círculos políticos y académicos a la decisión, ésta fue revocada en junio por el Consejo de Estado, y el gobierno apeló.
Las relaciones entre Riad y El Cairo continúan deteriorándose desde que Egipto mostró su apoyo al Ejército sirio y a Rusia en el conflicto de Siria. Arabia Saudí ha decidido, a su vez, reanudar sus relaciones con los Hermanos Musulmanes considerados en Egipto como una organización terrorista.
Arabia ha cortado también su suministro de petróleo a Egipto como represalia a la nueva política exterior egipcia. Hace algunos días el presidente Sisi denunció también en una entrevista “el apoyo de algunos países de la región al terrorismo” en Egipto. Se refería a los terroristas que operan principalmente en el Sinaí y han jurado lealtad al EI. Estos últimos han multiplicado los ataques contra las fuerzas militares y de policía egipcias en los últimos meses.
Arabia Saudí busca apoderarse de las dos islas con el fin de controlar mejor el tráfico marítimo en la región y controlar el acceso al canal de Suez, en su caso. Tal perspectiva no desagrada a Israel, que podría contar con estas dos islas para hacer transitar su gas hacia Europa.
Source: Agencias