La Fiscalía Nacional Financiera solicitó el martes 7 de diciembre cuatro años de prisión, incluidas dos condenas suspendidas, contra el ex presidente de la República, Nicolás Sarkozy, procesado por corrupción y tráfico de influencias en el llamado caso de las “escuchas”.
La fiscalía solicitó las mismas penas para el ex alto magistrado Gilbert Azibert, así como para Thierry Herzog, abogado histórico del ex jefe de Estado, pidiendo para este último además una prohibición de cinco años de ejercicio profesional.
“La República no se olvida de sus presidentes, aunque solo sea porque hacen historia. A la inversa, no podemos permitir que un ex presidente se olvide de la República y de lo que lleva representando desde hace varias décadas: un estado de derecho”, dijo el fiscal Jean-Luc Blachon.
Al denunciar los “efectos devastadores de este asunto, que golpea los valores de la República”, el magistrado consideró que había “dañado” la institución judicial, la profesión de abogado y la imagen presidencial.
El ex presidente es sospechoso de haber celebrado un “pacto de corrupción” en 2014, al obtener información protegida por el secreto, a través de su abogado Thierry Herzog, del alto magistrado Gilbert Azibert en un recurso de casación ante el Tribunal de Casación.
Este último también es sospechoso de haber intentado influir en el procedimiento a cambio de la promesa de una “mano amiga” para un puesto en Mónaco, que finalmente nunca consiguió.
Source: AFP