El presidente francés, Emmanuel Macron, obtuvo el martes (1 de septiembre) un compromiso de los líderes libaneses para promover la formación dentro de 15 días de un gobierno que ponga en marcha reformas, un mes después de la terrible explosión en el puerto de Beirut.
“Todos los partidos políticos sin excepción se han comprometido esta noche, aquí, a que la formación de este gobierno de misión no demore más de dos semanas”, declaró el presidente francés.
Emmanuel Macron tuvo discusiones “ricas y densas” con los líderes de las distintas fuerzas políticas por la noche en la residencia del embajador francés antes de su conferencia de prensa.
Macron prometió regresar al Líbano en diciembre, e indicó que organizaría, durante la segunda semana de octubre, una conferencia internacional de ayuda al Líbano en París, así como una reunión en la que los más altos funcionarios libaneses serán invitados.
Emmanuel Macron advirtió, al comienzo de su segunda visita a Beirut en un mes, que esta era la “última oportunidad” para el Líbano.
El martes por la noche dio a entender que, en ausencia de reformas, no se activarían los mecanismos de ayuda para el país sumido en una severa crisis económica.
Además de los representantes de la clase política tradicional, Macron se reunió en particular con el nuevo primer ministro, Mustafa Adib, designado unas horas antes de su llegada a Beirut. Desconocido para los libaneses, este académico de 48 años era hasta ahora embajador en Alemania.
Su rápido nombramiento es “una primera señal” de cambio, dijo el presidente francés.
Adib debe comenzar las consultas parlamentarias el miércoles para la formación de su equipo. Emmanuel Macron recordó que “la media de los últimos años” para la formación de gobiernos en Líbano fue de “entre 5 y 11 meses” por diferencias políticas.
La implementación de “reformas reales” para una mejor gobernanza y contra la corrupción endémica deberá permitir que el Líbano se beneficie de un apoyo internacional de varios miles de millones de euros, hasta ahora bloqueado por el estancamiento político.
El presidente francés aseguró, durante su rueda de prensa, que el martes por la noche se registró un “acuerdo de todos” sobre una serie de reformas económicas relativas a “la electricidad, el control de capitales, la auditoría esencial y la reforma del Banco Central y la contratación pública (…)”.
Las discusiones con los políticos estuvieron entre los puntos más sensibles de la visita de Emmanuel Macron, especialmente con Hezbolá. “Con Hezbolá hay una discusión que debe entablarse (…) No debe ser un tabú”, dijo Macron.
“Como hermanos”
Durante su rápida visita, el presidente francés también hizo balance de la distribución de la ayuda internacional prometida a raíz de la explosión en el puerto de Beirut, que dejó al menos 188 muertos y más de 6.500 heridos el 4 de agosto.
Él subió a dos barcos franceses que llegaron a Beirut con miles de toneladas de ayuda de emergencia.
Su visita partió de una dimensión simbólica para demostrar que los libaneses son “como hermanos para los franceses”, como proclamó.
Source: AFP