Un artefacto explosivo alcanzó un convoy militar de EEUU cerca de la base de Tayi, al norte de la capital de Iraq, Bagdad.
El Ejército iraquí confirmó en un comunicado que la explosión del martes había provocado que un contenedor transportado en uno de los vehículos se incendiara, pero no reportó víctimas, según Reuters.
Un grupo denominado Saraya al Zura al Ashrin reivindicó el ataque unas horas después.
Mientras tanto, el martes temprano, el Ejército iraquí negó los informes de los medios de comunicación sobre un ataque a un convoy que transportaba equipo militar estadounidense cerca del cruce de Jraishan, en la frontera entre Iraq y Kuwait.
Reuters había informado que una explosión cerca del cruce de Jraishan había tenido como objetivo un convoy que transportaba equipos para las fuerzas estadounidenses el lunes por la noche.
En un comunicado, el portavoz del Comando de Operaciones Conjuntas de Iraq, Tahsin al Jafagui, desestimó los informes de los medios de comunicación sobre un ataque en el cruce de Jraishan.
Anteriormente, una fuente de seguridad dijo que la explosión había sido causada por un grupo armado iraquí que tenía como objetivo una base militar estadounidense situada cerca del cruce. Pero otras fuentes de seguridad dijeron más tarde que se había atacado un convoy y no la base.
Según los informes, el grupo de resistencia Ashab al Kahf se atribuyó la responsabilidad del ataque y publicó un vídeo de una explosión vista desde la distancia.
El sentimiento anti-estadounidense ha aumentado en Iraq desde que Washington asesinó al alto comandante iraní Qassem Soleimani y al segundo al mando de las Fuerzas de Movilización Popular iraquíes (Hashid al Shaabi), Abu Mahdi al Muhandis, en enero.
Tras el ataque, los legisladores iraquíes aprobaron por unanimidad un proyecto de ley el 5 de enero, exigiendo el retiro de todas las tropas extranjeras.
Bagdad y Washington están actualmente en conversaciones sobre la retirada de las tropas estadounidenses.
Los grupos de resistencia iraquí se han comprometido a tomar las armas contra las fuerzas norteamericanas si Washington no cumple con la orden parlamentaria.
En julio pasado, el grupo Ashab al Kahf detonó varios vehículos blindados militares pertenecientes al ejército estadounidense en la provincia de Salahuddin, en el corazón de Iraq. Este devastador ataque ocurrió cuando un convoy logístico de fuerzas norteamericanas se desplazaba por la provincia cercana a la capital, Bagdad. Estos ataques anti-estadounidenses tienden a multiplicarse.
Source: Press TV