Una delegación del movimiento popular yemení Ansarulá, ha regresado a su país después de una visita de tres días a China.
La delegación se reunió con las autoridades chinas con las que trató de importantes cuestiones de interés común en los terrenos político, militar y humanitario, así como del proceso de negociación en la crisis yemení.
La cooperación parecen multiplicarse entre el movimiento de Yemen, por un lado, y China y Rusia, por otro.
En agosto, el sitio Akhbar al Saah, afirmó, citando al encargado de negocios de la Embajada rusa en Sanaa, que Rusia acaba de proporcionar un apoyo al Consejo Político Supremo de Yemen, compuesto por Ansarulá y el Congreso Popular General, el principal partido de Yemen, que está liderado por el ex presidente Ali Abdulá Saleh.
“El primer golpe asestado por Rusia a Arabia Saudí tuvo lugar hace unos días cuando Moscú rechazó ejercer presiones sobre las delegaciones de Ansarulá y de Ali Abdulá Saleh para que cedieran a las exigencias del enviado de la ONU, Ismail Walad Cheikh”, señaló el sitio.
Unos días más tarde, el antiguo presidente yemení, Ali Abdulá Saleh, afirmó que el nuevo gobierno de Yemen estaba dispuesto a cooperar con Rusia contra el terrorismo permitiendo el acceso de las Fuerzas Armadas rusas a bases militares yemeníes.
“Rusia es un país cercano a nosotros y nosotros extendemos nuestra mano a Rusia para cooperar en el campo de la lucha contra el terrorismo”, dijo Saleh en una entrevista con el canal Rossiya 24.
Source: Diverso
