Para evitar lo peor, el ex jefe de personal Gadi Eisenkot, quien dejó su cargo el 15 de enero, cree que es necesario a toda costa evitar el estallido de una guerra contra el Líbano.
“Esta guerra sería muy dolorosa para ambas partes y es importante que Israel haga todo lo posible para evitarla, en beneficio de las personas en ambos lados de la frontera”, dijo en una intervención en el Washington Center for Near East Policy.
Según el columnista del periódico libanés Al Akhbar, que informó sobre esta declaración, las palabras del general israelí son aún más curiosas porque él fue quien desarrolló la “ideología de Dahiyeh” (en referencia a los suburbios del sur Beirut, el bastión de Hezbolá), una estrategia militar que fomenta atacar a civiles e infraestructuras civiles y destruir pueblos y ciudades libanesas. Él diseñó esta estrategia en 2007 después de la guerra de 2006, cuando fue nombrado jefe de Estado Mayor.
Esta declaración tuvo lugar al mismo tiempo que el Canal 13 de la televisión israelí emitió el tercer episodio de un programa titulado “Tercera guerra del Líbano”, en el que un analista predijo la muerte de 100.000 israelíes en caso de una guerra contra Hezbolá.
Alon Ben David, un analista de asuntos militares, dijo que más de dos millones de israelíes no tendrían un refugio seguro en caso de que las sirenas de advertencia suenen. “Este problema no debe ser subestimado”, agregó Ben David.
“Si Israel entra en un conflicto militar con Hezbolá, enfrentará varios desafíos. Por ejemplo, el Gush Dan (la metrópolis del Gran Tel Aviv, que tiene alrededor de 3.5 millones de habitantes) probablemente será atacada con miles de misiles. No hablamos de los pequeños cohetes de Hamas. Estamos hablando de misiles con un peso de media tonelada de alto explosivo. Según estimaciones del Frente Interior, al menos 100.000 israelíes perderían la vida en caso de una confrontación militar con Hezbolá”, dijo el analista israelí.
A este respecto, Haim Tomer, un ex agente del Mossad, dijo que el poder de fuego de Hezbolá no era comparable al que Israel hace frente en el Sur. “La potencia de fuego de Hezbolá ni siquiera se parece a lo que tuvo este movimiento en 2006. Hezbolá tiene misiles de alta precisión, proyectiles pesados y obuses de cañón”.
El think tank israelí JINSA informó en 2018 sobre el poder de los misiles de Hezbolá y su peligro para la entidad sionista en caso de una guerra entre Israel y el movimiento de resistencia libanés.
“El poder de fuego de Hezbolá es superior al del 95% de los ejércitos del mundo. La cantidad de misiles de que dispone Hezbolá supera la de todos los miembros europeos de la OTAN”, dijo el informe del JINSA.
Source: Diverso