Un grupo bipartidista de senadores estadounidenses presentó una resolución sobre poderes de guerra para bloquear las hostilidades militares no autorizadas del presidente Donald Trump en Venezuela, advirtiendo que estas acciones podrían arrastrar a EEUU a una “guerra exterior innecesaria”.
La resolución bipartidista presentada en el Senado ordenaría al presidente retirar las fuerzas estadounidenses de Venezuela a menos que el Congreso autorice explícitamente la misión.
El senador republicano Rand Paul, de Kentucky, junto con los senadores demócratas Chuck Schumer, de Nueva York; Tim Kaine, de Virginia; y Adam Schiff, de California, lideran la iniciativa contra lo que denominaron hostilidades militares estadounidenses no autorizadas contra Venezuela.
La propuesta de los senadores se produce después de que Trump anunciara la semana pasada que las fuerzas militares estadounidenses desplegadas cerca de Venezuela podrían emprender acciones terrestres contra el país bolivariano.
Los legisladores afirman que el Congreso no ha aprobado acciones militares en Venezuela ni contra Venezuela y argumentan que la Constitución reserva esa facultad al poder legislativo.
La resolución se someterá a revisión en un comité especializado del Senado. Funcionarios de la administración Trump han presentado el despliegue de fuerzas estadounidenses en Venezuela y sus alrededores como parte de un esfuerzo más amplio para disuadir el narcotráfico. Sin embargo, Caracas y analistas afirman que la presión busca derrocar al gobierno del presidente Nicolás Maduro.
El senador Paul afirmó que etiquetar a líderes latinoamericanos como narcotraficantes sin pruebas era “una fantasía peligrosa”.
“Etiquetar a individuos como ‘narcoterroristas’ sin pruebas solo para abrir la puerta al uso de fuerza letal no es una política legítima”, publicó Paul el miércoles en X.
El senador escribió que tal acción “elude el debido proceso, destroza los límites constitucionales y empuja a EEUU hacia otra guerra exterior innecesaria”.
Paul afirmó que la política exterior y las acciones militares de EEUU deben basarse en el derecho internacional.
“Nuestras decisiones de seguridad nacional deben basarse en hechos y regirse por la ley, no por representaciones políticas”, dijo, y agregó: “Cualquier otra medida pone en peligro nuestros valores y a nuestras tropas”.
El ejército estadounidense ha matado a más de 80 personas desde principios de septiembre en ataques contra embarcaciones que, según la administración Trump, transportaban drogas hacia EEUU.
Source: Press TV



