El Washington Post informó que China intenta aprovechar la inestabilidad creada por el presidente estadounidense Donald Trump para unir a los líderes contra el orden liderado por EEUU.
El periódico señaló que el presidente chino, Xi Jinping, recibió en China a un nutrido grupo de dignatarios extranjeros para reuniones que espera “unirán a las potencias regionales en sus quejas compartidas hacia el orden global liderado por EEUU y las políticas de Trump”.
Enfatizó que este foro es clave en la campaña de China para emerger como un socio confiable y un contrapeso a la volatilidad estadounidense en un mundo cada vez más multipolar.
Reconoció que “la presencia del primer ministro indio, Narendra Modi, en particular —su primera visita al país en siete años— marca un hito en los esfuerzos de Pekín por reparar las relaciones con un país cortejado por EEUU, pero afectado negativamente por los aranceles de Trump”.
Carla Freeman, directora del Instituto de Política Exterior de la Escuela de Estudios Internacionales Avanzados de la Universidad Johns Hopkins, afirmó que los países de la Organización de Cooperación de Shanghai están “unidos principalmente por su resentimiento hacia EEUU, más que por un propósito común”.
“Se trata de países importantes con sus propias agendas”, señaló Freeman.
Por su parte, Klaus Song, analista del Instituto Mercator de Estudios sobre China, un centro de estudios con sede en Berlín, afirmó que las políticas impredecibles de Trump han contribuido a la formación de “una coalición de países con ideas afines contra EEUU”.
Según el periódico, incluso si la reunión de Tianjin no logra mucho, los analistas creen que simplemente asistir podría ser valioso para que los gobiernos y líderes demuestren que no están aislados a pesar de las sanciones occidentales.
Source: Al Mayadeen