La importancia geopolítica y geoeconómica de Bolivia son dos factores esenciales al analizar los intentos de EEUU para derrocar al gobierno del presidente Evo Morales, afirmó el ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana.
A juicio de Quintanta, en la nación andina existe otro factor que favorece a Washington para ejecutar sus estrategias intervencionistas, al igual que en otros países de América Latina: la existencia de una élite criolla dispuesta a someterse a sus designios.
Al dictar una conferencia magistral el martes en la oriental ciudad de Santa Cruz de la Sierra, el ministro recordó que Bolivia posee una gran variedad de recursos naturales estratégicos como el gas natural, el litio y minerales.
Señaló que el país dispone de un sector político que respalda la intromisión e injerencia en los asuntos internos de otros Estados y que recurren a estrategias desde la ocultación de esa intervención, hasta el engaño a la opinión pública bajo un manto de aparente imparcialidad y objetividad.
El imperio necesita de sectores de la sociedad que se enajenen en su favor. No hay intervención si no hay una élite entreguista y antinacional que prefiere el plato de lentejas que le paga el imperio a defender la soberanía de su Patria, sostuvo el titular.
Durante su exposición, demostró con documentos cómo el senador opositor Oscar Ortiz, defensor a ultranza de la injerencia extranjera, recibe financiamiento de diferentes ONGs (organizaciones no gubernamentales) de EEUU.
Asimismo, denunció que otro líder opositor, Diego Ayo, intenta ridiculizar en sus artículos la reciente creación de la Escuela Nacional Antiimperialista, aprovechando su condición de columnista en varios medios de comunicación.
Quintana denunció que Ayo fue funcionario de la Usaid (Agencia de EEUU para el Desarrollo Internacional) y asesor de la embajada de Washington aquí, si bien se presenta ante la opinión pública como ‘analista independiente’.
Desde hace semanas, el ministro de la Presidencia expone tales denuncias en distintas regiones del país, como parte de la presentación de su libro ‘BoliviaLeaks: la injerencia de EEUU contra el proceso de cambio desde 2006 a 2010’.
El texto reúne documentos desclasificados donde se pone al desnudo los reiterados intentos del gobierno estadounidense por desestabilizar y derrocar la revolución democrática y cultural que encabeza el presidente Morales desde 2006. Bolivia tiene mucho que decir respecto a esta experiencia traumática de verse asediada política, ideológica, cultural y hasta militarmente, argumentó Quintana.
A su juicio, estas investigaciones ‘ayudan a darnos cuenta de las estrategias que EEUU utiliza para doblegar a nuestros países y también a comprender que los que han seguido la receta norteamericana han terminado, sin excepciones, con mayores índices de explotación, injusticia, pobreza y exclusión’.
El mejor camino es la defensa de nuestra soberanía y autodeterminación, resumió el ministro de la Presidencia.
Source: Prensa Latina